Los pasillos de la granja muestran a los cerdos hacinados en jaulas. La piel de estos animales está repleta de heridas con pus y gangrena a causa de su continua fricción con los barrotes. La desnutrición y los desprendimientos de órganos reflejan la falta de atención veterinaria. Los cadáveres de los lechones en descomposición se amontonan junto con el resto de animales vivos.

Las paredes de la nave ocultan una suciedad extrema: bebederos vacíos, telarañas y pienso infectado por heces de ratas. Bajo el suelo de la nave, se observan residuos con larvas y gusanos. Un cerdo presenta un gran tumor en la oreja derecha. La desatención en la granja aboca a los animales a un trágico destino: el sufrimiento y la muerte. 

Estas son las imágenes que observan y narran a Público desde el Observatorio de Bienestar Animal (OBA) —antes Equalia ONG— cuando acceden a una granja porcina ubicada en Quintanilla del Coco (Burgos). La investigación tuvo lugar entre mayo y octubre de 2023. La ONG afirma que se trata de uno de los peores casos de maltrato animal revelados hasta la fecha en España. La granja está formada por cinco naves con 5.000 cerdos, aproximadamente. El dueño de la explotación es el alcalde del Partido Popular (PP) del municipio burgalés. 

"Este no es un caso aislado, se debe a un fallo total de la cadena de suministro que conlleva que los consumidores elijan un producto con certificado con sello Welfair de bienestar animal de una granja vinculada a un proveedor de Lidl", declara a este diario Julia Elizalde, mánager de campañas del OBA.

El reportaje recoge también el momento en el que los cerdos son cargados en el camión hacia el matadero. "El operario encargado les golpea repetidamente con una herramienta similar a un martillo y la picana eléctrica", cuenta Elizalde.

Falta de higiene

La organización de protección animal describe la presencia de dos cubos expuestos a la intemperie con cadáveres de lechones, resto de placenta y abundantes moscas. El Observatorio asegura que se han encontrado patas y lechones muertos esparcidos a lo largo del recinto. "Según la legislación, la nave debe contar con uno o varios contenedores homologados herméticos destinados a la contención de animales muertos para la recogida de cadáveres", explican. 

"En las jaulas de cerdas parideras, un lechón tiembla, está enganchado en el suelo de rejilla. Debido a la carencia de espacio, el animal es orinado por la madre y pisoteado por sus hermanos", observa la organización. El Observatorio de Bienestar Animal añade que algunos cerdos presentan tumores y heridas sangrantes. "Un trabajador bebe cerveza y vierte parte de la misma sobre unos lechones".

La presencia de estos animales implica riesgo de transmisión de enfermedades a humanos como la salmonelosis o leptospirosis, según informan los investigadores.

Denuncia por maltrato animal y acción por omisión

Los responsables y operarios de la granja han sido denunciados por el Observatorio de Bienestar Animal ante el juzgado de Lerma, en Burgos, por presuntos delitos de maltrato animal con agravante de muerte, así como la modalidad de acción por omisión —la falta de una acción que de igual manera se considera un acto delictivo—.

La ONG pide la clausura de la granja, la destitución del alcalde y una condena ejemplar por la pésima gestión de los animales. También, desde el Observatorio, han denunciado a la empresa cárnica que presuntamente gestiona la carga de los animales. "Exigimos una mejora drástica en los controles de las políticas de bienestar animal a través de las certificadoras", manifiesta Julia Elizalde, mánager de campañas del OBA.

La miembro de la organización recuerda que en España no hay una nueva legislación en materia de bienestar animal para animales de granja. "La Comisión Europea solo va a entregar a finales de 2023 la propuesta del nuevo reglamento de transporte, dejando fuera a los animales que viven en jaulas y a los animales que están en la granja", explica. Elizalde concluye que la prohibición de las jaulas en la Unión Europea es urgente.