El Parque Nacional de Timanfaya, situado en la isla canaria de Lanzarote, es una maravilla de la naturaleza, un paraje volcánico lleno de tonalidades grisáceas y rojizas que casi nos transportan a otro planeta. Al visitarlo, muchos turistas contratan un paseo en dromedario. Una práctica que se ha visto envuelta en polémica a raíz de la denuncia de una mujer por los malos tratos recibidos por una cría de camélido.

En un vídeo publicado en Instagram se observa cómo varios hombres, los adiestradores, golpean de forma reiterada al pequeño dromedario tanto con palos como con las manos. Dos de ellos se suben en las sillas que cargan y otro le azota para que se levante y emprenda la marcha, pero el animal no puede soportar el excesivo peso que carga sobre su joroba y sus maltrechas patas.

"Se suben encima para que se 'acostumbre' a llevar a desalmados que pagan para eso, con las patitas desholladas de estar en el suelo de piedras, soportando altas temperaturas y muchas horas de 'trabajo' al sol, sin agua, sin comida...", asegura la denunciante.

Asegura que la escena es un "maltrato animal de libro" y que interpondrá una denuncia: "Se me rompió el corazón de verlo y escuchar como esa pobre cría chillaba, aún se me empapan los ojos de recordarlo..."

El portavoz del sector camellero, Francisco Mesa, ha reconocido en una entrevista en la Cadena SER, que se trata de una mala práctica y ha pedido al Ayuntamiento de Yaiza (Lanzarote) que inicie los trámites para sancionar comportamientos como los expuestos en el vídeo.

Mesa ha pedido disculpas por la escena pero a su vez afirma que estos maltratos perjudican al resto del sector, que ha ido introduciendo mejoras en las condiciones de estos animales, incluídas las referidas al transporte de turistas.