Tenemos presidente del Gobierno y tendremos Consejo de Ministros muy pronto. De ahí, para abajo, tendremos un Poder Ejecutivo elegido por mayoría parlamentaria que integra a una coalición de dos partidos, PSOE y Sumar, con 153 escaños. La alternativa era un Gobierno de PP y Vox con 169 escaños, pero no ha encontrado suficientes apoyos para sumar 176 escaños de 350. Para los incrédulos: se trata de la democracia en su más contundente expresión.

Para lograr ese Ejecutivo de coalición se han sumado 26 escaños más de seis partidos aparte de PSOE y Sumar, hasta los 179, tres puntos más que los estrictamente necesarios. ¿Y cuál ha sido la respuesta del PP a este proceso democrático que da a Pedro Sánchez cuatro años de Presidencia más? “Una equivocación”. Eso ha dicho Feijóo a Sánchez cuando fue a ¿felicitarle? y darle la mano por su elección, pasándose por el arco del triunfo más de la mitad de los votos de ciudadanas y ciudadanos.

Bien mirado, es lógico: con llamar “hijo de puta” al presidente del Gobierno desde la Presidencia de la Comunidad de Madrid y decirle que sumar 179 escaños para ser investido es un error se cierra el círculo abierto por Mario Vargas Llosa: las y los españoles votamos mal. El premio Nobel es el colega de firma de Mariano Rajoy para apoyar la candidatura de Milei a la Presidencia de Argentina, así que concluimos que votar a Milei es lo correcto. Sí, Milei, al que apoyan Vargas-Llosa, Vox y Rajoy, el mentor de Feijóo, y que dice cosas tan sensatas como esta: “Entre la mafia y el Estado prefiero a la mafia. La mafia tiene códigos, la mafia cumple, la mafia no miente, la mafia compite”.

Pero la equivocación es la de Pedro Sánchez, según Feijóo.

Para describir mejor este delirio, sabemos, en definitiva, que Vargas-Llosa tiene como proyecto que votemos bien, que él, Vox y Rajoy apoyan una “mafia” en vez de un Estado y que Feijóo, como buen ‘delfín’ de un Rajoy echado al monte, considera que lo que ha hecho Sánchez es un error, aunque las urnas lo respalden. Porque votamos mal y el presidente del Gobierno es un “hijo de puta”, según la líder madrileña (¿y española?) del PP.

¿Les parece duro? Pues es todo tal cual, ¿o ustedes han oído algo parecido a un plan, un proyecto de Gobierno alternativo a la amnistía al procés para resolver el conflicto político, aparte de meter a todos en la cárcel? Yo tampoco. Feijóo no tiene nada, no ofrece nada, pero lo de Sánchez, mal, un error, un mal voto y peores apoyos.

El PP se enfrenta, pues, a una legislatura con dos valores incuestionables, uno a cada lado: por uno, la ultraderecha de Vox y Ayuso ‘la de la fruta’ y, por otro la máxima de Rajoy-Conrad-Goethe tatuada en el escaño: “El único hombre que no se equivoca es el que nunca hace nada”. Pues mucha suerte.