MADRID.- El presidente catalán, Artur Mas, el lehendakari vasco Iñigo Urkullu, la presidenta de Navarra, Uxue Barkos, serán los únicos presidentes autonómicos ausentes en el desfile militar que se celebrará este lunes en Madrid, con motivo de la Fiesta de la Hispanidad. Pablo Iglesias, por su parte, ha declinado por medio de una carta enviada a la Casa Real su participación en la recepción que tendrá lugar en el Palacio Real.

Ni Mas ni Urkullu han acudido nunca al desfile militar, mientras que Uxue Barkos, de Geroa Bai, que se estrenaría en el de este año, no estará presente por motivos de agenda, ya que asistirá a la sesión plenaria del Comité de las Regiones en Bruselas. 

Lo que tendrá de diferente el desfile con respecto al del año pasado serán las caras nuevas que se podrán ver en la tribuna de invitados, ya que todos los presidentes autonómicos que asistirán lo harán por primera vez salvo cuatro —la andaluza Susana Díaz, el gallego Alberto Núñez Feijóo, el asturiano Javier Fernández y el castellano leonés Juan Vicente Herrera—.

Además, será el primer desfile para la nueva alcaldesa de la capital, Manuela Carmena, quien será una de las autoridades civiles que recibirá a los Reyes a su llegada a la plaza de Cánovas del Castillo —también conocida como plaza de Neptuno— para el inicio de los actos conmemorativos.

Guillermo Fernández Vara, presidente de Extremadura, volvió a ser elegido para el cargo en sustitución de José Antonio Monago en los citados comicios autonómicos. Por eso éste no será su estreno en el Día de la Hispanidad, puesto que ya fue presidente de Extremadura desde 2007 y hasta 2011. Un caso similar es el de Emiliano Revilla, que fue reelegido presidente de Cantabria, pero ya había acudido a los actos de esta festividad durante los años en los que gobernó esta comunidad desde 2003 a 2007.

800.000 euros de presupuesto

En cuanto al desfile, la parada militar cuenta con la participación de unos 3.400 militares y guardias civiles —400 más que el año pasado—, 48 vehículos y 53 aeronaves. El coste del desfile alcanza los 800.000 euros, una cifra similar a la del año pasado.

A partir de las 11.00 horas, la plaza de Cánovas del Castillo se convertirá en el escenario del acto central del Día de la Fiesta Nacional, que consiste en un homenaje a los que dieron su vida por España y un desfile militar terrestre y aéreo.

Desfilará la bandera de la OTAN, por ser España uno de los países anfitriones del ejercicio "Trident Juncture 2015", el mayor de la OTAN que ya ha comenzado en territorio español.

No faltarán las unidades de La Legión y Los Regulares: el Grupo de Artillería de la Legión y el Tabor "Alhucemas" del Grupo de Regulares nº 52.

Tras la parada militar, los reyes ofrecen la tradicional recepción en el Palacio Real, a la que está prevista la asistencia de más de un millar de invitados.