Los estudiantes en prácticas, remuneradas o no, ya tienen derecho a cotizar. Esta medida ha entrado en vigor el 1 de enero de 2024 y se recoge en el documento de la última reforma de las pensiones.

A pesar de que las comunidades autónomas gobernadas por el PP pidieron una moratoria o, directamente, una anulación de la medida, un total de 458.959 estudiantes de Formación Profesional en prácticas empezarán a cotizar a la Seguridad Social en este 2024. Además, la vicepresidenta del Gobierno, Yolanda Díaz, ha asegurado que más de 500.000 estudiantes universitarios ya se han visto beneficiados.

"Esto supone un gran avance en la protección de los más jóvenes. Pero vamos a más. Este 2024 aprobaremos el Estatuto del Becario", ha asegurado Díaz a través de un mensaje en la red social X, antes Twitter.

El tiempo que los estudiantes dediquen en sus prácticas, sean remuneradas o no, tendrá validez de cara a su jubilación. Esta medida se ha podido aplicar después de que el PP mostrase su rechazo y, de hecho, ya consiguiese que la reforma se aplazase el pasado octubre.

Datos y requisitos

La Seguridad Social bonificará el 95% de las cotizaciones y el Ministerio de Educación, Formación Profesional y Deportes financiará el 5% restante en 2024. El gasto medio por estudiante que deberán asumir las comunidades autónomas será de unos 18 euros por año.

Aunque los estudiantes no tendrán derecho a cobrar el paro, fuentes del Gobierno han justificado que se trata de "una extensión de derechos que beneficia a los más jóvenes, quienes podrán comenzar una carrera de cotización que les permitirá generar derechos a futuro".

La protección será la correspondiente al régimen de la Seguridad Social aplicable, pero sin la protección por desempleo, la cobertura del Fondo de Garantía Salarial y por Formación Profesional. Tampoco aportarán al Mecanismo de Equidad Intergeneracional. Respecto a las prácticas no remuneradas, se excluirá también la protección por la prestación de incapacidad temporal derivada de contingencias comunes.

Cada día de prácticas formativas no remuneradas será considerado como 1,61 días cotizados, sin que pueda sobrepasarse el número de días del mes correspondiente.

La medida también beneficia a antiguos becarios, ya que podrán suscribirse a un convenio especial para cotizar los períodos de formación realizados antes de la entrada en vigor de esta norma, y hasta un máximo de cinco años. Esta medida se está negociando en el marco del diálogo social y está pendiente de desarrollo normativo a través de una Orden ministerial.