"Mi voz, mi decisión" es una campaña que se lanza en Liubliana, Eslovenia, por activistas y organizaciones de ocho países europeos bajo el liderazgo de la asociación eslovena Inštitut 8 Marec (Instituto 8 Marzo). El objetivo es avanzar en la accesibilidad y seguridad de las distintas opciones reproductivas, con especial hincapié en el derecho al aborto, para todas las mujeres en Europa. 

La iniciativa reúne a numerosas organizaciones europeas como el movimiento español liderado por las activistas Kika Fumero y Cristina Fallarás, la Asociación de Mujeres Finlandesas Unioni, el Ogólnopolski Strajk Kobiet de Polonia (Huelga de Mujeres Polacas), el colectivo Wschod, en Francia un Colectivo "Ma Voix, Mon Choix" liderado por Alice Coffin y Silvia Casalino y la Campaña por los Derechos del Aborto y el Consejo Nacional de Mujeres de Irlanda.

"Vemos mucha tristeza y desesperación en todo el mundo. Decidimos traer esperanza, crear un movimiento conectado por los derechos reproductivos en Europa y a nivel universal. Queremos asegurar que cada mujer tenga derecho a un aborto libre y accesible", asegura Nika Kovač, coordinadora de la campaña. 

"Nuestra misión es conseguir una alianza en cada país europeo y expandir el movimiento a nivel global", explicó Maja Koražija, coordinadora de red de la campaña.

El movimiento ha presentado una Iniciativa Ciudadana Europea a la Comisión Europea para lograr los cambios legales necesarios para cumplir con su objetivo. "Nuestro próximo objetivo es recoger un millón de firmas en apoyo a esta propuesta en los próximos meses", asegura Kovač.

Llamamiento al cambio

Durante la rueda de prensa en la que se presentó la iniciativa, las activistas compartieron sus relatos de la situación en Polonia, Italia o España y arrojaron luz sobre las duras realidades a las que se enfrentan las mujeres para poder abortar. 

"En España defendemos el derecho al aborto en nuestra Constitución, haciéndonos eco de la reciente medida de Francia. Y nos unimos a este gran movimiento feminista para garantizar un aborto gratuito y accesible en todos los Estados miembros de la Unión Europea", explicó Kika Fumero, portavoz desde España a propósito de esta iniciativa, junto con Cristina Fallarás. 

"Una Europa justa y segura es posible, y lucharemos por ello como nunca, enfrentándonos a nuestros políticos, hablando con mujeres en toda Polonia y construyendo el ejército feminista de nuestro tiempo", afirmó Dominika Lasota, de Wschod (Polonia).

Aiski Ryökäs, de Naisasialiitto Unioni (Finlandia), explicó el trabajo de su movimiento para consolidar el derecho al aborto en su país: "Como resultado de nuestro duro trabajo, el derecho al aborto en Finlandia se vio finalmente reforzado por ley el año pasado. Cuando nos enteramos de esta campaña, inmediatamente pensamos: ahora es el momento de hacer lo mismo en toda la Unión Europea".

"En la República de Irlanda sabemos lo restrictivos que son nuestros servicios y el efecto en cadena que esto tiene en la capacidad de las personas para ejercer ese derecho dentro de nuestros límites. Seguiremos trabajando y luchando para que el aborto sea accesible a todas aquellas mujeres que lo necesiten o deseen", apuntó Richael Carroll de la campaña por el Derecho al Aborto (Irlanda). 

Un reto ante las elecciones europeas

"Hemos decidido hacer realidad el aborto seguro y accesible en Europa, si la Comisión Europea rechaza nuestra iniciativa por los juegos políticos antes de las elecciones de la UE, estamos dispuestas a recurrir al Tribunal de Justicia", anunció la francesa Alice Coffin. 

Desde el activismo polaco han hecho referencia a la complicada posición de los derechos feministas en el país. "Vengo de un país donde las mujeres mueren en hospitales porque se les niega el aborto. Las últimas elecciones las ganaron las mujeres y jóvenes que votaron para que el infierno de las mujeres termine. Seis meses después de eso, tenemos cuatro proyectos de ley sobre el aborto en el Parlamento. Dos para legalizar el aborto y uno para despenalizar el aborto, apoyado por más del 90% de los votantes de la coalición gobernante", explicó Marta Lempart del Ogólnopolski Strajk Kobiet (Huelga de Mujeres Polacas).

Sin embargo, la activista polaca reclamó la necesidad de este movimiento a nivel europeo para poder salvar a la ultraderecha polaca y consolidar estos derechos.

"El único (proyecto de ley) que se logrará proceder es la prohibición del aborto porque hay un partido fundamentalista cristiano en nuestra coalición de gobierno que nunca permitirá que el infierno de las mujeres en Polonia termine. Por lo tanto, necesitamos esto a nivel europeo. Necesitamos superarlos", puntualizó Lempart.