La creciente presión hospitalaria en Alemania está obligando a las autoridades sanitarias a trasladar a pacientes enfermos de coronavirus a otros países para que puedan ser tratados en centros médicos. Mientras, el país germano continúa pulverizando todos sus récords de contagios e incidencia desde el inicio de la pandemia. 

En concreto, en el último día se han notificado en el país 65.371 nuevos contagios de covid-19 y la incidencia acumulada está en 336,9 casos por cada 100.000 habitantes en los últimos siete días. Además, actualmente hay 532.600 casos de coronavirus activos. La tasa de vacunación está estancada y solo el 67,7% de los ciudadanos cuentan con la pauta completa.

Estas dramáticas cifras dejan una situación desoladora en los hospitales. Según los datos de la Asociación Interdisciplinar de Medicina Intensiva (DIVI) recogidos por Efe, en los centros de 100 de un total de 400 distritos del país solo hay una cama libre. Además, en 50 zonas ya no queda hueco en las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI). 

Aunque la cifra total de pacientes en la UCI es menor que la que las de los momentos más álgidos de la segunda y tercera ola, la escasez de personal ha hecho que bajen las capacidades de estas unidades y que haya menos camas disponibles que hace un año.

Baviera y Baden-Württenberg, las zonas más afectadas

La situación es especialmente grave en el estado de Baviera, al sureste y en el de Baden-Württenberg, al suroeste. En concreto, la semana pasada, dos pacientes tuvieron que ser trasladados desde un hospital de Múnich, la capital bávara, hasta la ciudad italiana de Bolzano.

Los expertos advierten de que la situación actual es más grave que la de diciembre de 2020. "Los servicios sanitarios están saturados, operaciones necesarias tienen que aplazarse, la incidencia crece y cada día se anuncian cifras récord de contagios", ha descrito la Cruz Roja de Baviera en un comunicado conjunto con otras organizaciones.

"La actual saturación de las UCI y los servicios de urgencia, en buena parte a causa de pacientes no vacunados, hacen la situación claramente más dramática. Hay enfermos graves y de urgencia que tienen que ser trasladados a hospitales que están a horas de distancia", ha concretado el presidente de la Cruz Roja bávara, Theo Zellner.