Con las cuatro víctimas mortales que se produjeron este sábado en Alemania, ya son diez los fallecidos por el brote de una variante de la bacteria Escherichia coli, según informaron las autoridades sanitarias de Berlín. Al cierre de esta edición, el número de afectados superaba los mil.

La última víctima mortal del síndrome urémico hemolítico (SUH), que provoca este germen patógeno, es una mujer de 84 años que falleció por la mañana en Lauenburg, al norte de Alemania, informa Efe. El origen de los pepinos contaminados es el mercado central de Hamburgo, en el noreste del país. Hasta allí llegaron desde dos empresas de Málaga y Almería y también de Holanda. La UE investiga dónde se produjo el brote.

El Gobierno francés investiga tres posibles casos de la misma epidemia

Por su parte, los responsables sanitarios de Reino Unido comunicaron este sábado el fallecimiento de dos alemanes en su territorio que, supuestamente, habían consumido los pepinos infectados, según la Agencia de Protección Sanitaria, informa Europa Press.

La polémica al respecto de la responsabilidad de la contaminación no quedará resuelta hasta que no se conozcan los resultados de la inspección. La Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición sostiene que no puede descartarse ninguna hipótesis sobre el origen de la contaminación de la verdura. Pudo contaminarse en su origen, en el transporte, en el destino o en la manipulación para su comercialización, como insistió el pasado viernes la ministra de Medio Ambiente, Rosa Aguilar.

El número de afectados por la bacteria supera ya los mil

Sin embargo, Alemania ha suspendido la importación de algunos productos agrícolas españoles. El director general de la asociación de exportadores de frutas y hortalizas de Murcia (Proexport), Fernando Gómez, alertó este sábado del daño producido a los productores españoles pese a que no está comprobado si fallaron los controles en España, en la frontera o en el mercado de Hamburgo, donde se detectó el producto defectuoso.

La Comisión Europea recomendó a los ciudadanos de la UE que hayan visitado recientemente Alemania que vigilen posibles síntomas, como diarreas hemorrágicas y, en ese caso, consulten con su médico. Países como Suecia, Dinamarca y Países Bajos también han confirmado casos.

Los productos también podrían haber llegado a Francia, donde investigan tres posibles casos, según informó este sábado el Gobierno francés. 'Las primeras investigaciones relativas al origen alimentario de esa epidemia señalan a unos pepinos importados de España', recuerda el comunicado de las autoridades de París.