Vodafone España elevó un 0,9% los ingresos por servicio en su último año fiscal (desde el 1 de abril de 2016 hasta el 31 de marzo de 2017), hasta situarse en 4.507 millones de euros, según ha informado este martes la compañía. En términos comparables, eliminando el efecto del cambio de modelo en la financiación de terminales, el crecimiento habría sido del 4%.

Por su parte, los ingresos totales de Vodafone España alcanzaron los 4.973 millones de euros, un 5,3% más en términos comparables. En España, Vodafone se reparte con Telefónica y Orange cerca del 85% del mercado de telefonía móvil.

compañía ha explicado que el alza de los ingresos y el control de costes permitieron elevar el resultado bruto de explotación (Ebitda) un 8,8% en el último año, hasta los 1.360 millones de euros.

 La compañía contaba a finales de marzo con 14,4 millones de clientes de telefonía móvil en España, unos 3,2 millones de usuarios de banda ancha y 1,3 millones de clientes de televisión.

A nivel mundial, Vodafone registró al cierre de su año fiscal pérdidas por importe neto atribuido de 6.297 millones de euros, cifra que supone ampliar un 16,5% los números rojos del ejercicio precedente y que refleja el impacto de las amortizaciones asumidas en su negocio en India, que alcanzaron los 3.700 millones de euros.

A este respecto, Vodafone precisó que en la primera mitad de su ejercicio fiscal asumió un impacto por amortizaciones de su negocio en India por valor de 6.400 millones de euros, que finalmente se ha visto reducido a 3.700 millones de euros tras el acuerdo para combinar Vodafone India con Idea Cellular.

Vodafone ha optado por fusionar su negocio en India con Idea Cellular ante la feroz competencia que existe en este populoso mercado.

Sin tener en cuenta el impacto de elementos extraordinarios, el resultado recurrente de Vodafone en el conjunto de su ejercicio fiscal arrojó pérdidas de 1.972 millones de euros, un 61,5% inferiores a las sufridas un año antes.

No obstante, el beneficio operativo de la operadora británica entre abril de 2016 y marzo de 2017 alcanzó un total de 3.725 millones de euros, un 182% más.

Los ingresos de Vodafone experimentaron una caída interanual del 4,4%, hasta 47.631 millones de euros, incluyendo un descenso del 3,6% en la facturación por servicios, hasta 42.987 millones, mientras que la deuda neta de la compañía aumentó un 8,2%, hasta 31.169 millones.

Mejora en las previsiones

En un intento de tranquilizar a los inversores sobre el futuro, el grupo prevé crecimiento en los beneficios y un salto en el flujo de caja libre para el año en curso, gracias a una estabilización de los ingresos medios de sus clientes de contrato y a unos menores gastos. "Esperamos mantener nuestro impulso en el ejercicio financiero entrante, generando un cash flow de unos 5.000 millones de euros", declaró Vittorio Colao, consejero delegado de Vodafone.

El grupo predijo un incremento del Ebitda ajustado en términos orgánicos de entre el 4% y el 8%, así como una generación de caja libre de unos 5.000 millones de euros, por encima de los 4.100 millones del año anterior. La previsión para el flujo de caja del año en curso, en un momento en que la empresa reduce la inversión en su red tras una actualización, es superior a la media prevista por los analistas de 4.660 millones de euros.