BARCELONA.- 109.637 socios del Barcelona están llamados este sábado en el Camp Nou a escoger nuevo presidente, en unas elecciones con dos aspirantes con muchas opciones (los expresidentes Joan Laporta y Josep Maria Bartomeu), frente a otros dos candidatos (Toni Freixa y Agustí Benedito) con nulas posibilidades de convertirse en el 41 presidente de la historia de la institución.

Las urnas se han abierto a las 9:00 horas sin ninguna incidencia, en un día festivo para el barcelonismo, que escogerá presidente para las próximas seis temporadas. Las urnas de las 136 mesas se han instalado en una de las explanadas del Camp Nou y mucho antes de abrirse las puertas ya había un número importante de socios haciendo cola para votar, en una jornada que se espera soleada y muy calurosa. Los presidenciables han madrugado para votar Josep Maria Bartomeu lo ha hecho a las 9:00 horas, Joan Laporta a las 9:30, Toni Freixa a las 10:00 y Agustí Benedito a las 10:30. Doce horas después se cerrarán las urnas y sobre las 22:30 horas, como muy tarde, se conocerá al nuevo mandatario.

Al final han sido cuatro los aspirantes que superaron el corte de las 2.534 firmas que debieron reunir como precandidatos para entrar en una campaña electoral que ha durado ocho días, en los que se han debatido los programas, los presidenciables se han lanzado todo tipo de reproches y sólo ha habido un debate en que han coincidido los cuatro, el del pasado martes en 'TV3'.

Después de la validación de firmas, las cifras de los cuatro candidatos que pasaron el corte y de los tres que quedaron apeados fueron las siguientes: Josep Maria Bartomeu (8.554 votos validados); Joan Laporta (4.272); Agustí Benedito (3.367) y Antoni Freixa (3.068). No pasaron Joan Batiste (2.518), Jordi Majó (901) ni Jordi Farré, que ni siquiera entregó las papeletas.

La votación se celebrará el sábado, una fecha que ha sido muy criticada por todos los aspirantes, a excepción de Josep Maria Bartomeu, que ha aplaudido la decisión de fijar este día por parte de la junta gestora presidida por Ramon Adell, que desde que tomó el cargo ha estado en el ojo del huracán por algunas de las decisiones adoptadas, tanto fichajes (Aleix Vidal y Arda Turan) como ventas (Gerard Deulofeu).

No parece a priori que vaya a ser una jornada con mucha afluencia, por tratarse de un sábado y, porque en unas circunstancias parecidas hace cinco años, a mediados de junio, no votó ni el 50 % de los asociados, de un censo de 118.665 personas.

Entonces, había un candidato con mucha diferencia en la intención de voto, Sandro Rosell, que ganó la contienda y que tres años después presentó la dimisión, entregándole la presidencia a Josep Maria Bartomeu.

En aquel junio del 2010, votaron 57.088 socios (48,1 % de participación), con el siguiente reparto de votos: Sandro Rosell (35.021 votos, 61,35 %), Agustí Benedito (8.044, 14,09 %), Marc Ingla (7.014, 12,29 %), y Jaume Ferrer (6.168, 10,80 %).

Ante estos números, y con un censo actual de 109.637 socios, es posible que no haya mucho más de 40.000 votantes, lo que hace sospechar que quizá el nuevo presidente no tenga más de 20.000 votos.

En los últimos días de campaña, algunos candidatos han exhibido números de sondeos recientes, mientras que otros han deslizado algunas cifras, que sólo confirman una cosa: no parece que vaya a haber una proclamación de presidente por mayoría absoluta como sucedió en el 2010, en que Sandro Rosell arrasó en las urnas al lograr el número más elevado de votos de la historia electoral del Barça.

Laporta ha querido atraer a Benedito y Freixa

Esta hipotética igualdad que se pueda dar en las votaciones llevó hace unas semanas a uno de los aspirantes, Joan Laporta, a solicitar públicamente a dos de sus rivales (Agustí Benedito y Toni Freixa) a que abandonasen la carrera electoral o unir fuerzas, ya que, según el expresidente, no tienen ninguna opción de ganar, según las encuestas de las que dijo disponer Laporta.

Esta propuesta fue recibida como una afrenta, aunque pasados unos días los acercamientos se han centrado más entre Laporta y Benedito, que en su tiempo coincidieron en la antigua plataforma opositora 'El Elefante Azul', que tampoco han fructificado, debido a que el acuerdo no se ha desatascado en quién se retira y quién lidera el voto. A pesar de presiones externas, incluso del ámbito de la política, y que Benedito haya sentenciado reiteradamente que él no hará presidente a Laporta, finalmente no ha habido acuerdo y los cuatro aspirantes concurrirán por separado.

Así, el reclamo de Laporta por solicitar el voto útil queda pendiente a la reacción que tengan los electores cuando depositen su voto, si han atendido a su reclamo o finalmente se reparte entre cuatro, como así espera Bartomeu, quien considera que si su votante le confirma en las urnas, podría volver a la presidencia, debido a la dispersión que sospecha que habrá entre sus oponentes.

El Barcelona ha dispuesto de una organización sin reservas para recibir a los votantes, incluidos autocares desde diferentes puntos de Catalunya, algo que ha sido criticado por algunos aspirantes porque han entendido que la gestora podría haber realizado una maniobra electoral en favor de Bartomeu por acercar a los peñistas a Barcelona, un colectivo que ha mostrado durante la campaña una gran simpatía por el expresidente dimitido hace unas semanas.