¿Dónde está Sahin?, se preguntaban en Valdebebas esta semana. En los últimos días, nadie ha visto al jugador turco ni por los campos de entrenamiento, ni por el ultramoderno gimnasio de la ciudad deportiva del Real Madrid. Ni siquiera Kaká, Granero, Adán, Lass y Callejón, los jugadores que se han quedado en Madrid trabajando durante el parón liguero provocado por los partidos internacionales de selecciones, han compartido sesiones de trabajo con su compañero. Llevan días sin saber de él.

Esta semana Sahin ha entrado a formar parte de la lista de jugadores lesionados del Madrid que, instigados por Mourinho, ha decidido tratarse con servicios médicos ajenos al Madrid. La intención del entrenador portugués era que la recuperación de Sahin fuera supervisada por uno de sus médicos de confianza en el Inter de Milán ante las alarmantes demoras en la rehabilitación del futbolista. Otros jugadores blancos ya visitaron la temporada pasada al doctor Noronha, un traumatólogo portugués.

La intención de Mourinho era que le revisara un médico del Inter

Mourinho no se fía de los médicos del club, no entiende cómo no han sido capaces de recuperar al que ha sido su fichaje estrella para esta temporada, lesionado desde el 13 de julio en un entrenamiento de la pretemporada llevada a cabo en Los Ángeles. En Valdebebas hay quien no entiende esa decisión, ya no sólo por saltarse a los servicios médicos, externalizados a través de Sanitas, sino porque se preguntan para qué se ha construido un centro con todas las comodidades y adelantos destinados a la recuperación de los jugadores lesionados si luego no se utiliza.

La solución a eso ya la dio Mourinho, que este verano pretendió incorporar a un médico portugués, pero, de momento, esa una de las pocas demandas a la que la zona noble aún no se ha plegado. La parcela médica es la única que aún no acaba de estar diseñada al gusto del entrenador-mánager del Madrid, aunque el frente ya lo ha abierto y pelea para que finalmente le hagan caso.

Sahin no ha disputado un minuto vestido de blanco. En realidad, su inactividad se prolonga desde el 15 de abril, cuando aún pertenecía al Borussia Dortmund y sufrió un problema serio en la rodilla derecha. Con esta lesión fue fichado por el Real Madrid, con Mourinho como principal valedor de su fichaje. El jugador empezó a trabajar en Valdebebas antes de que el equipo partiera a Estados Unidos, donde sufrió una lesión en los ligamentos de la rodilla izquierda de carácter leve, según el parte. Sin embargo, su debut se retrasó hasta el Trofeo Bernabéu, donde tampoco pudo estrenarse porque días antes sufrió un nuevo esguince por forzar. Fue entonces cuando Mourinho decidió que Sahin fuera otro paciente más a tratar fuera de Valdebebas.