Apenas ha cumplido los cincuenta años y ya le otorgan un "Premio a Toda una Carrera", pero el actor y director italiano Toni Servillo, cuya trayectoria ha sido distinguida hoy por el Festival de Cine Italiano de Madrid, no se considera "tan mayor" como para recibir este tipo de galardones.

"No entiendo estos premios como un reconocimiento a mi carrera, sino al cine italiano", declara en una entrevista a Efe el artista napolitano al referirse a una cinematografía que "ha vuelto a ser la de los grandes maestros", capaz de "contar la realidad con un lenguaje nuevo y original".

El intérprete, que prepara estos días en Madrid el estreno de la obra "Trilogía de veraneo", incluida en la programación del XXVI Festival de Otoño, recuerda con un punto de nostalgia su debut teatral, en 1977.

"Fue al poco de llegar a la universidad, con un grupo de amigos que compartían mi pasión por el teatro, y representamos una obra menor de Bertolt Brecht, 'Las visiones de Simon Machar'", rememora el artista, que "nunca" pensó en el teatro como "una profesión".

Fundador del Teatro Studio de Caserta, Servillo se unió posteriormente a Mario Martone y Antonio Neiwiller para crear el Teatro Uniti, una de las instituciones teatrales más prestigiosas de Italia.

"Es un laboratorio en el que reflexionamos sobre la interpretación y las artes escénicas", declara el actor sobre una compañía que en los últimos veinte años "ha realizado trabajos de teatro, cine, ópera o radio, pero siempre trabajando a niveles muy elevados y con una gran coherencia".

Tras quince años consagrados a los escenarios, Servillo sucumbió a los cantos de sirena del cine en 1992, cuando se estrenó "Muerte de un matemático napolitano".

"Mi amigo Mario Martone, cofundador del Teatro Uniti, propuso que hiciéramos una película para contar historias desde otras expresiones", explica.

Aunque la Academia Italiana de Cine ya le había concedido dos premios David di Donatello al mejor actor -por "Las consecuencias del amor" y "La ragazza del lago"-, han sido dos títulos recientes, "Il Divo" y "Gomorra", ambos de 2008, los que han catapultado a Servillo como uno de los mejores actores europeos.

El polifacético artista considera "una suerte" haber participado en estos dos filmes, ya que "despertaron un gran interés para el cine italiano".

"Además, me han dado la oportunidad de trabajar mucho más en Europa, como en la película de (la directora francesa) Nicole Garcia que acabo de rodar", añade.

Aunque el celuloide le ha otorgado "mucho reconocimiento", el artista nunca deja de lado su primera pasión, el teatro, que ahora le arrastra a Madrid con "Trilogía del veraneo", una obra dividida en tres comedias y que, durante los últimos dos años, ha representado en más de 130 ocasiones.

"Sé que, en España, 'Il Divo' y 'Gomorra' tuvieron una repercusión importante, y por eso me agrada aún más estar aquí para mostrar mi otra faceta, la del teatro, demostrando que trabajo en los dos campos con la misma pasión", afirma Servillo.

Nueva York, Milán o Moscú se han rendido a "La agitación", "Las aventuras" y "El regreso", la tríada cómica que forma "Trilogía del veraneo", una pieza escrita por Carlo Goldoni en 1761 y que llega el miércoles a los Teatros del Canal.

"Su mejor carta de presentación es disfrutar de una obra de Goldoni, uno de los autores más grandes del siglo XVIII en Europa", asevera Toni Servillo sobre un montaje "de una gran complejidad" y que, a través de sus tres textos, escenifica una imagen "muy actual" de la sociedad.

Entre sus nuevos proyectos, el actor señala el estreno, en abril de 2010, de "Nosotros creemos", un filme en el que interpreta al patriota y político italiano Giuseppe Mazzini, impulsor de la unificación de Italia.

"Los protagonistas de la historia son los jóvenes, los disidentes, y Mazzini sólo aparece tres o cuatro veces", resume Servillo sobre el personaje al que encarna el filme, que aparece representado como "un personaje completo que permite echarle un vistazo diferente a la Historia".