El jugador español de los Trail Blazers de Portland, Rudy Fernández, fue dado de alta y pudo abandonar el hospital donde pasó la noche después de sufrir un golpe en el pecho y la cadera derecha tras una falta personal de Trevor Ariza durante el partido que enfrentó a su equipo con los Lakers de Los Ángeles.

Fernández fue dado de alta del hospital y se encuentra en la lista de lesionados, por lo que es duda para el partido que su equipo disputará hoy contra los Mavericks de Dallas.

Rudy Fernández se disponía a entrar a canasta cuando fue derribado por Ariza al intentar quitarle el balón por la espalda. El jugador español cayó al suelo exactamente bajo el aro, y se encogió dando muestras de dolor.

Los entrenadores de los Trail Blazers corrieron para auxiliarlo y sus compañeros de equipo se enfrentaron a los jugadores de los Lakers. El alero Lamar Odom, del equipo de Los Ángeles, fue sancionado con un partido de suspensión por abandonar el banquillo y unirse a la trifulca, por lo que no podrá jugar cuando los Lakers se enfrenten a los Rockets de Houston.

El pívot de los Lakers, el también español Pau Gasol, permaneció alejado del altercado, pero se mantuvo observando a Fernández.

"Fue una jugada desafortunada, y una caída también desafortunada", dijo Gasol, mientras que Ariza se mostró arrepentido y pidió disculpas a Fernández

Después de sufrir la falta de Ariza, Fernández fue sacado del campo de juego en camilla con una protección para el cuello.

Su compañero de equipo y compatriota, Sergio Rodríguez, pasó la noche en el hospital esperando noticias de su amigo. "No podía respirar, y eso fue lo que le asustó, pero ahora ya está bien", dijo Rodríguez.

Ambos jugadores vieron una grabación del partido porque Fernández quería saber qué había pasado después de abandonara el campo de juego.

Rodríguez comentó que Fernández se encuentra de buen ánimo "aunque no podía reír demasiado porque siente dolor".

Fernández promedia 10.4 puntos, 2.8 rebotes y 2.1 asistencias esta temporada.

Contra los Lakers, Fernández anotó una canasta de tres puntos casi a finalizar el tercer cuarto que permitió a los Trail Blazers conseguir situarse por delante en el marcador con un contundente 81-51.