Las colecciones para la próxima primavera-verano presentadas en la Semana de la Moda femenina de Milán se caracterizaron por un abandono del lujo y la vuelta del romanticismo, y en la pasarelas milanesas junto a los grandes destacaron las propuestas de nuevos diseñadores.

En la Semana de la Moda de Milán, que comenzó el pasado sábado, se ha apreciado cómo la crisis económica también ha hecho mella en los diseñadores que han eliminado el lujo desenfrenado de otras temporadas.

Para algunos modistas, el lujo ha dejado su lugar a un delicado romanticismo, donde se acentúa la feminidad dulce, y no agresiva, de la mujer con tantas faldas, la mayoría largas, gasas, tules, y pocos pantalones, casi siempre de cintura alta.

Por ejemplo, los modistos Dolce&Gabbana presentaron una colección que combina el romanticismo discreto con elementos geométricos de aire futurista.

Dolce&Gabbana dejaron de lado las prendas ceñidas para optar por la holgura y los tonos monocolor poco llamativos, y trajes que imitan las batas o pijamas de seda.

Tambien el "Rey" Giorgio Armani abandonó su sobriedad tradicional para decantarse por una mujer más romántica y apostó por la ligereza de los tejidos y el movimiento.

Para vestir de día, Armani se mantuvo fiel a su traje pantalón aunque dejó espacio para las faldas lisas, mientras que introdujo vestidos drapeados con escote palabra de honor y faldas vaporosas, que dejan traslucir estampados de colores pastel que quedan lejos de cualquier estridencia o se adornan con cristales "swarovski".

Las pasarelas milanesas también dejaron espacio a una nueva oleada de jóvenes diseñadores que se codearon con los grandes nombres de la moda italiana.

Hoy, durante la jornada de clausura, presentó su colección la diseñadora Kira Plastinina, que ya se ha hecho un nombre en el panorama internacional con sus 16 años.

Su colección, destinada a las adolescentes, fue premiada hoy por Cámara de la Moda italiana.

Mientras que fue acogida con buenas críticas la colección para la firma Gianfranco Ferré realizada por los jóvenes diseñadores Tommaso Aquilano y Roberto Rimondi

La colección de Les Copains estuvo a cargo de Albino, otro de los nombres nuevos en el panorama, que también propuso su propia línea de moda.