El presidente de la Reserva Federal estadounidense, Ben Bernanke, dijo el martes que la peor recesión en Estados Unidos desde la Gran Depresión probablemente haya concluido ya, pero que la recuperación será lenta y generar nuevos empleos llevará tiempo.

"Aun cuando desde una perspectiva técnica la recesión probablemente ya haya terminado en este punto, todavía se percibirá como una economía muy débil por algún tiempo", dijo Bernanke en respuesta a una pregunta tras pronunciar un discurso en una conferencia de la Brookings Institution.

Al declarar el final de la recesión, Bernanke fue ligeramente más allá de la reciente evaluación de la Fed, donde el banco central estimó que la economía se estaba nivelando.

Sin embargo, el funcionario advirtió que el crecimiento del próximo año probablemente no sería mucho mayor a la denominada tasa potencial a largo plazo de la economía, lo que significa que la actividad sería lenta en asimilar la poca actividad y reducir el nivel de desempleo.

"La visión general de la mayoría de los pronósticos es que el ritmo de crecimiento de 2010 será moderado, menos de lo que se esperaría dada la profundidad de la recesión debido a los actuales vientos en contra", dijo, advirtiendo que eso retrasaría la generación de empleo.

Bernanke reconoció que la recuperación podría ser más fuerte o más débil que la estimación de los economistas de un 2,5 por ciento, pero advirtió que los problemas en el mercado laboral continuarían bajo esta tasa.

"Por supuesto que hay riesgos a ambos lados de ese pronóstico -podríamos tener una recuperación más fuerte, podríamos tener una recuperación más débil", afirmó.

"Pero si de hecho vemos un crecimiento moderado, pero no crecemos bastante por encima de la tasa subyacente de crecimiento potencial, entonces desafortunadamente, el desempleo bajará lentamente", agregó,

El paro en Estados Unidos se ha elevado a un 9,7 por ciento desde el inicio de la recesión, en diciembre de 2007, y se estima que llegue al 10 por ciento en los próximos meses.

Los comentarios de Bernanke reconocen implícitamente que existe la posibilidad de una recuperación con forma de V más fuerte de lo esperado en Estados Unidos. El último sondeo Blue Chip a economistas estimó que el crecimiento alcanzará la sólida tasa de 3 por ciento anual en el tercer trimestre.

Al ser consultado sobre los planes del Gobierno de Obama de una reforma profunda del sistema de regulación financiera en EEUU, Bernanke dijo ser optimista sobre su conclusión, pero reconoció que hasta ahora los legisladores estadounidenses se han centrado principalmente en la reforma del sistema sanitario.

"Estoy bastante confiado en que se aprobará una reforma integral. Esto ha sido una calamidad demasiado grande y un problema muy serio, y claramente los problemas regulatorios fueron parte de esto", expresó.

El plan de Obama pretende dar más poder a la Fed para que vigile las firmas financieras que son consideradas demasiado importantes para la salud del sistema y establece normas para facilitar la liquidación de las grandes empresas que tengan problemas.

Esta también crea una agencia que protege a los consumidores de los productos financieros complejos que se encuentran en el centro de la crisis hipotecaria que condujo a la quiebra de Lehman Brothers.

"La perspectiva de la Reserva Federal es que no queremos estar en la posición en que nos encontrábamos en octubre y septiembre pasados, por lo que estamos muy interesados en tratar de apoyar una reforma que será efectiva, eso ayudará a prevenir este tipo de crisis en el futuro", dijo Bernanke.