La normalidad está siendo la tónica general en los mercados centrales de abastecimiento, las grandes superficies y mercados minoristas, aunque todo el sector ha reconocido que se ha hecho acopio de genero durante la semana pasada, en previsión de un posible desabastecimiento de pescado.

La flota pesquera, por su parte, permanece amarrada a puerto a la espera de lo que ocurra esta semana en París, durante el encuentro que mantendrán los países comunitarios para elaborar un informe donde se recojan posibles medidas en favor de los pescadores, ante el alza del precio del gasóleo.

El mercado central de abastecimiento de Madrid ha registrado hoy poca actividad comercial, ya que la entrada de genero en lunes siempre es menor y la venta es prácticamente de pescado de importación.

Fuentes del sector han destacado que este mercado siempre tiene un remanente de pescado procedente del litoral español, aunque han reconocido que la afluencia de los minoristas al mercado ha sido algo menor por la huelga de los transportistas.

Por su parte, el presidente del Gremio de Mayoristas de Pescado de Mercabarna, Leandre Serra, ha asegurado que mañana y pasado "habrá pescado" en el mercado mayorista y ha animado a los tenderos a que acudan a comprar "sin miedo".

La actividad diaria en Mercamálaga no se ha visto afectada, dado que los lunes no hay mercado de pescado, aunque no ha habido entradas de camiones y a partir de mañana el comportamiento será más irregular.

En relación con la paralización de la flota pesquera, desde Galicia, el 80 por ciento de la flota de altura de Vigo permanece amarrada en el puerto pesquero y el resto se sumará al paro hasta el próximo 15 de junio.

La Consellería de Pesca ha detallado que casi la mitad de la flota de bajura salió hoy al mar a trabajar y ha indicado que, según datos de la Secretaría General del Mar del Gobierno central, también una tercera parte de la flota gallega de más de quince metros de eslora que opera en caladores nacionales, en altura o en gran altura está también faenando.

Como incidentes en la jornada de hoy, destaca que piquetes de marineros procedentes de otros puertos impidieron hoy en Marín la salida de varios buques de pesca al mar, que tenían el propósito de salir hacia aguas del Gran Sol.

Los pescadores de los puertos de Girona y Tarragona y las barcas de cerco de los de Barcelona no han salido a la mar, mientras que las barcas de arrastre de los puertos de Barcelona y Vilanova i la Geltrú sí han salido a pescar.

La flota de bajura de Vizcaya, compuesta por un centenar de barcos, está amarrada en puerto, mientras que la de altura comenzará a regresar al puerto de Ondarroa a partir del próximo miércoles para realizar un paro de una semana.

En Bermeo, el principal puerto vasco de bajura, permanecen amarrados unos sesenta barcos, la mayoría de los cuales debía haber comenzado el pasado 27 de mayo la costera artesanal del bonito.

En Ondarroa, la flota de altura retornará a puerto el próximo miércoles y, a partir de entonces, "no habrá pescado".

La flota de bajura de Guipúzcoa, integrada por unos 70 barcos, permanece amarrada por considerar que "no es rentable" salir a la mar con los actuales precios de los carburantes.

La de Cantabria permanece también amarrada a puerto y desde Asturias, los barcos de bajura "están casi todos en la mar", especialmente los de las zonas central y oriental de la costa regional, mientras la flota de altura está protagonizando un paro escalonado.

La flota de bajura de Almería se ha incorporado al paro indefinido que, desde hace más de diez días, mantienen los barcos de arrastre almerienses, con lo que hoy se ha suspendido la actividad en las cinco lonjas de la provincia y en Málaga, las cinco cofradías de la provincia han secundado la huelga.

Según la Confederación Española de Pesca (Cepesca), las flotas de bajura de la Comunidad Valenciana, Cataluña, Guipúzcoa y Vizcaya se han sumado al paro, con lo que ya el 85% de la flota permanece amarrada a puerto.

Por otra parte, pescadores de distintos puntos de la geografía española se darán cita esta semana en Madrid para acordar un calendario de movilizaciones, según han decidido hoy en el transcurso de un encuentro celebrado en Aveiro (Portugal).