'En Estados Unidos soy el padre de mis hijas, pero en España sólo lo soy de unas niñas extranjeras'. Manuel, padre de gemelas nacidas de un vientre de alquiler en EEUU, y al que el consulado de San Francisco negó su inscripción en el Registro Civil el pasado marzo, espera desde hace más de cuatro meses una resolución de la Dirección Nacional del Registro y del Notariado que no llega.

Como él, al menos otras cuatro familias españolas aguardan a que el organismo, dependiente del Ministerio de Justicia, resuelva si todos sus hijos, nacidos gracias a un vientre de alquiler una práctica legal en el país americano, pero prohibida expresamente en el ordenamiento español por la Ley de Reproducción Asistida lo son tanto en EEUU como en España.

Los consulados negaron el registro de los menores por considerarlo ilegal

Mientras llega la resolución de Justicia, las familias han debido sortear los obstáculos de una Administración que, de momento, no reconoce a sus hijos. 'Mi mayor miedo era que a mí me pudiera pasar algo y entonces qué ocurriría con mis hijas', explica Manuel. Su hijas, como los de las otras tres familias, tienen pasaporte estadounidense al haber nacido en ese país, por lo que pudieron viajar a España con un visado de turista. El problema llegó cuando a los tres meses expiró el plazo de ese visado.

'No quería que mis hijas estuvieran en situación irregular, por lo que comencé a tramitarles sus documentos como extranjeras', explica Manuel. En menos de un mes, sus gemelas ya tenían su Número de Identificación de Extranjero (NIE). 'En la oficina de extranjería se extrañaron de mi caso, y me dijeron que lo que tenía que tramitar era el DNI, como hijas de español, pero cuando les expliqué que no tenía el libro de familia porque el consulado no había querido registrar a las niñas, me tramitaron las tarjetas, así que para el Ministerio de Interior son mis hijas, pero no para Justicia', señala Manuel.

Luis y Óscar (nombres ficticios), una pareja sevillana, a la que el consulado de Los Ángeles (EEUU) también negó el registro de su hija el pasado junio, iniciaron los mismos trámites que Manuel. En un par de semanas la niña tendrá su documento de extranjera. 'Al principio nos resistíamos a tramitar estos documentos porque era como aceptar la situación de limbo en la que nos dejó el consulado, pero al mismo tiempo es el único documento legal que tenemos en el que figuramos como padres, por lo que si nos ocurre algo ella tendría protección ', indica Luis.

Se trata de siete bebés nacidos de un vientres de alquiler en EEUU

Pero no ha ocurrido así en todos los casos. Julio y César (nombres ficticios), padres de una niña, nacida también de por subrogación, no han podido tramitar el documento de extranjera de su hija. 'Nos dijeron que lo que a ella le correspondía era un DNI, como hija de español', explica Julio, quien critica que el Gobierno 'deje a las familias en una completa indefensión al negarse a registrar a los bebés'.

El pasado enero, la Dirección General de los Registros y del Notariado, emitió un dictamen que obligó al consulado de Los Ángeles a inscribir en el Registro Civil a los hijos de un matrimonio homosexual, nacidos por subrogación en EEUU. En el escrito, la entonces directora de la dirección, Pilar Blanco, argumentó, entre otras afirmaciones, que el bien interés del menor debía prevalecer en esta situación. Desde el Ministerio de Justicia señalan que se resolverá cada caso 'conforme se vaya presentando y atendiendo a las circunstancias y características de cada uno'.