La plataforma Vía Galega, integrada por sesenta organizaciones sociales en defensa de los derechos nacionales de Galicia, ha convocado una manifestación este domingo en Santiago para, según sus organizadores, "crear más conciencia nacional y reforzar la autoestima colectiva" de los gallegos "como país".

En la última manifestación, celebrada el año pasado pese a las restricciones por la crisis sanitaria, la plataforma reunió a más de mil personas en la capital de Galicia. Además, mantiene campañas para exigir el derecho de autodetermimación, trabajo digno que impida que las trabajadoras gallegas tengan que emigrar, y la conformación de selecciones gallegas que puedan concurrir a competiciones nacionales e internacionales en todas las disciplinas deportivas.

Vía Galega se fundó en 2018 con un manifiesto, la Carta de Derechos del Pueblo Gallego, en la que incluía su derecho "a decidir libremente su futuro como nación que quiere contribuir a la construcción de un mundo mejor, justo y solidario", y a conformarse "como Estado soberano si así lo decidieran democráticamente" los gallegos.

La manifestación del domingo también conmemora los 176 años de la revolución de abril de 1876, provocada por el levantamiento de militares gallegos comandados por el coronel Miguel Solís contra la dictadura del general Narváez durante el reinado de Isabel II.

Los sublevados, que además de las libertades cercenadas por Narváez denunciaban que Galicia era "una verdadera colonia de la corte" madrileña, disolvieron las instituciones estatales y crearon la Xunta Superior do Reino de Galicia.

La rebelión concluyó con el fusilamiento de la mayoría de ellos. Desde entonces se les conoce como "los mártires de Carral," por la localidad coruñesa en la que fueron ajusticiados y donde, desde 1905, se les homenajea con un monumento en el centro del pueblo.

"Salvando las distancias, el contexto social de entonces se parece al de ahora", afirma Anxo Louzao, uno de los portavoces de Vía Galega. "La crisis por la guerra de Ucrania, que se solapa sobre la provocada por la emergencia sanitaria y sobre los efectos de la crisis financiera del 2008, ha ocasionado una subida desorbitada de precios que en Galicia tiene mayor repercusión", explica: "Aquí tenemos los salarios más bajos de todo el Estado y las segundas pensiones más bajas".

Louzao alude expresamente al incremento de los precios de la energía a pesar de que Galicia es una de las principales productoras de electricidad del Estado y donde su precio al consumidor, paradójicamente, está también entre los más elevados. "Las industrias eléctricas se llevan cada año 2.700 millones de euros por la energía que producen en Galicia, es inadmisible que no exista una tarifa eléctrica gallega ni una empresa pública propia", apunta.

El portavoz añade que a eso se suman los cerca de 3.000 millones de déficit entre lo que Galicia aporta y recibe del Estado para servicios sociales, las alrededor de 4.000 empresas que cotizan fuera del país pese a tener sus centros productivos en él, y la desaparición del sector financiero gallego. Además "el Gobierno de Feijóo en Galicia no cree en el país, y el del Estado sigue considerándonos como una colonia, como en los tiempos de la revolución de abril, añade.

"Somos un país rico en recursos naturales y en materias primas, tenemos sectores productivos con mucho potencial, y, sobre todo, queremos acabar con esa falacia de que Galicia está condenada a ser sumisa y dependiente. No, Galicia tiene voluntad de existir como nación, y eso es lo que queremos expresar con la manifestación del domingo", concluye.