BARCELONA
Los grupos turísticos guiados en Ciutat Vella no pueden, desde el 1 de marzo, superar las 20 personas. Con la puesta en marcha del decreto definitivo que ordena los grupos guiados con finalidad turística en este distrito, el Ayuntamiento de Barcelona busca mantener el equilibrio entre la actividad económica y la vida del vecindario.
La nueva normativa también establece que los guías no pueden utilizar altavoces para las explicaciones. Así, se fomenta a su vez el uso de audioguías en todos los barrios. Finalmente, las nuevas limitaciones decretan que no se puede superar el aforo de grupos establecidos en algunas plazas y calles del distrito; sobre todo, en los espacios más concurridos debido a su alto interés.
El decreto estará en vigor hasta finales de verano y permitirá también sancionar las actividades que se estén llevando a cabo sin licencia en el espacio público. Para dar a conocer todas estas novedades, se ha preparado un díptico con la información de las medidas que los agentes cívicos podrán entregar a los guía, y que también se encontrará en diversos establecimientos turísticos de la zona.
Aforos permitidos
Plaza de Sant Jaume (máximo 8 grupos)
Plaza Reial (máximo 8 grupos)
Plaza del Rei (máximo 5 grupos)
Fossar de les Moreres (situándose en los bordes, máximo 3 grupos)
Paseo del Born (máximo 3 grupos)
Fachada de Santa Maria del Mar (máximo 3 grupos)
Plaza del Pi (máximo 3 grupos)
Plaza de Sant Felip Neri (máximo 2 grupos)
Plaza de Isidre Nonell (máximo 2 grupos)
Calle de Salomó Ben Adret / placita de Manuel Ribé y entornos (máximo 2 grupos)
Plaza de la Barceloneta (máximo 1 grupo)
Fachada del Palau de la Música (plaza de Lluís Millet, máximo 1 grupo)
Multas de hasta 3.000 euros
Los agentes cívicos informan a los guías sobre el decreto y, si se incumple la normativa, dan alerta a la Guardia Urbana quien expedirá una sanción de hasta 1.500 euros
Para lograr el cumplimiento del decreto, veinte agentes cívicos controlan desde la semana pasada la actividad de las calles de Ciutat Vella. La principal función de esta veintena de agentes, que trabajan por parejas en turnos de mañana y de tarde todos los días de la semana, es informar a los guías sobre el contenido del decreto. Su segunda responsabilidad es informar a la Guardia Urbana si se dan infracciones.
La Guardia Urbana, por su parte, tiene la competencia, si encuentra guías acompañando a grupos superiores a lo establecido o excediendo el aforo permitido en la zona, de expedir sanciones en el mismo lugar. Las multas pueden alcanzar los 1.500 euros, y llegar hasta los 3.000 euros por reincidencia.
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