El desplazamiento del anticiclón africano hacia la península traerá consigo una notable estabilidad desde este martes hasta el jueves. Este fenómeno, combinado con la alta insolación, la ausencia de nubes y los vientos débiles o en calma, provocará la tercera ola de calor de este verano. Se esperan temperaturas de hasta 42 grados en amplias áreas del sur y este peninsular, así como en Balears.

La Agencia Estatal de Meteorología ha anunciado que "la situación se intensificará este miércoles", el día más crítico de este episodio, especialmente en la mitad este peninsular. A partir del jueves, una masa atlántica más fresca comenzará a entrar por el noroeste, provocando un descenso generalizado de las temperaturas el viernes.

Este martes se prevé un aumento de las temperaturas en gran parte del centro y este peninsular, Balears y litoral cantábrico oriental. Las máximas superarán los 40 grados en amplias zonas de la meseta Sur, los valles del Tajo, Guadiana, Guadalquivir y Ebro, la cuenca del Genil y la depresión central de Catalunya. En el alto Guadalquivir, en Jaén, se podrían alcanzar los 42 grados.

En Balears, se superarán los 37-38 grados en el interior de las islas y los 40 grados en puntos del interior de Mallorca. Las temperaturas también serán altas en el este de la meseta Norte y en las zonas bajas del área pirenaica, donde se pueden alcanzar los 38 grados. En la ribera del Miño y el cantábrico oriental, se registrarán hasta 35 grados, aunque en estas últimas zonas no se cumplirán los criterios de ola de calor.

El miércoles, las temperaturas seguirán en aumento en Andalucía y el valle del Ebro, especialmente en las zonas interiores del área mediterránea, donde los vientos de poniente se intensificarán. Se prevé un descenso notable de las temperaturas en el Cantábrico oriental y el oeste de Galicia.

Este día, las temperaturas también serán elevadas en los valles del Tajo y del Guadiana, así como en el interior de la provincia de Málaga, donde se espera que lleguen a 38-40 grados. En las zonas bajas del área pirenaica, se podrán alcanzar nuevamente los 37 grados, mientras que en el sur de Ourense y el este de la meseta Norte se prevén 36 grados.

Las temperaturas mínimas seguirán siendo altas

Las temperaturas mínimas también se mantendrán elevadas durante este episodio en los valles fluviales de la mitad sur y este, así como en las zonas afectadas por vientos terrales, donde podrían superar los 22-24 grados, e incluso alcanzar los 25 grados de manera local, especialmente en las noches del miércoles y el jueves.

El jueves, se prevé que el descenso de las temperaturas que comenzó en el extremo norte peninsular se extienda a gran parte del medio y alto Ebro. Sin embargo, en las áreas del extremo sur, las temperaturas aumentarán debido a los vientos terrales.

En el resto del país, las temperaturas seguirán con pocos cambios, y durante esta jornada se espera que los valores más altos se registren en el interior sureste peninsular y en el interior de la provincia de Málaga, donde es probable que se superen los 42 grados.

A partir del viernes, se espera un descenso generalizado de las temperaturas en gran parte del país, siendo más notable en la mitad oriental peninsular, lo que marcará el fin de la ola de calor. Sin embargo, las temperaturas seguirán siendo elevadas en algunas zonas del interior, especialmente en el valle del Guadalquivir.