El Ministerio de Sanidad aprobará este viernes el Plan Integral de Prevención y Control del Tabaquismo 2024-2027, eliminando la prohibición de fumar en ciertos espacios privados, como el coche. También sacará a consulta pública una de las primeras medidas de la estrategia, el empaquetado genérico de los paquetes de tabaco.

La iniciativa forma parte de la estrategia para reducir el consumo de tabaco, que se habría iniciado se aprobase o no el plan, según ha declarado a EFE Pedro Gullón, el máximo dirigente de la Dirección General de Salud Pública.

La estrategia antitabaco saldrá adelante, pese a que varias comunidades autónomas no estén de acuerdo, sin someterla a votación. Se realizará mediante un acuerdo de cooperación, donde las regiones se pueden sumar parcial o totalmente a los apartados, especificando cuáles son las líneas rojas.

Gullón ha declarado que le daría mucha pena que las comunidades no se adhirieran. A su juicio, van a tener "muy complicado" justificar la decisión pues iría "en contra del criterio de sus técnicos, de sociedades científicas y de la sociedad".

No se prohibirá fumar en espacios privados

Una de las propuestas que se planteaban en el borrador inicial era prohibir el humo en ciertos espacios privados, donde los coches podían estar incluidos. Finalmente, el Ministerio de Sanidad ha optado por eliminar la propuesta que acarreaba algunas dudas.

Por otro lado, sí se mantiene la medida que plantea aumentar los lugares "de uso público o colectivo" donde se vetará el tabaco, los cigarrillos electrónicos y los "productos relacionados". Sin embargo, el Ministerio no ha concretado todavía cuáles serán esos sitios.

"Son espacios difíciles porque son de propiedad privada, así que ha sido como una 'autoenmienda'", ha explicado el director de Salud Pública. También ha defendido la imposibilidad de incorporar una memoria económica, lo que muestra que las comunidades que lo reclaman evidencian "un desconocimiento altísimo de cómo funcionan los planes de este tipo".

La mayoría dicen "no" al plan

Las comunidades autónomas que se han adherido al plan antitabaco son cinco, entre ellas están Catalunya, Canarias y Navarra. Sin embargo, el resto de regiones ha decidido "no emitir voto" ya que consideran que el procedimiento "no es el adecuado". 

Balears no apoya el plan antitabaco, que se aprobará en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS), por la falta de "concreción" en algunas medidas, especialmente en las relacionadas con la financiación. 

De la misma manera, Aragón no se adhiere a la estrategia. "Necesitamos tener un plan que sea todavía mejor que el que nos proponen ahora y especialmente que tenga recursos económicos", ha dicho Nuria Gayán, directora de Salud Pública de la región. 

Murcia adopta la misma posición. "Está redactado sin rigor" y "carece de memoria económica", ha relatado el portavoz del Ejecutivo regional, Marcos Ortuño. Cantabria, por su parte, no se adhiere al plan, pero lo acatará si el Ministerio de Sanidad lo aprueba. 

En cambio, comunidades como Extremadura se decantan a favor de la estrategia, mientras que País Valencià defenderá "los espacios sin humos", pero exigiendo una memoria económica justificativa.