El Ministerio de Consumo ha impuesto sanciones por valor de 90.000 euros a dos grandes operadores de comercio electrónico (cuyo nombre no ha detallado) por poner a la venta falsas rebajas en el último Black Friday. Estas empresas de e-commerce subieron el precio de diferentes productos antes de esa fecha y después los rebajaron a su precio original. 

Así lo ha avanzado el Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, encabezado por Pablo Bustinduy, que ha precisado que los 90.000 euros son la suma de las dos sanciones impuestas a esos operadores. Consumo, además, mantiene abiertos otros seis expedientes sancionadores por esta misma práctica, con una propuesta de sanción superior al medio millón de euros.  

Dichas actividades engañosas han tenido lugar en un momento de muchas rebajas en tiendas y grandes almacenes para incentivar compras en el último fin de semana de noviembre. Ello supone, según Consumo, una infracción del artículo 20 de la Ley de Ordenación del Comercio Minorista. 

Las multas se imponen después de una investigación de la Dirección General de Consumo en la que, durante ese periodo de tiempo, se llegaron a monitorizar, cada día, más de 1.000 productos a través de una herramienta conocida como Price reduction tool, lanzada por la Comisión Europea. Los técnicos detectaron que un 60% de las empresas investigadas habían cometido este fraude en un 20% de los productos analizados.

Tras evaluarse estos resultados, la Dirección General de Consumo ha decidido monitorizar nuevos productos de cara a las rebajas de verano que acaban de comenzar. Se trata, según afirman, de seguir controlando los descuentos que se ofrecen a través de las ventas online para detectar falsas rebajas.