Ha costado pero finalmente los presupuestos catalanes están en tramitación en el Parlament. Tras meses de negociación, las cuentas han entrado en la cámara y este martes se votarán las enmiendas a la totalidad, aunque el Govern de Pere Aragonès tiene asegurados los apoyos para que salgan adelante con el pacto con el PSC y los comuns. Sin embargo, las cifras no son del agrado del colectivo sanitario, que ha protagonizado jornadas de huelga y protestas en las últimas semanas, también en Catalunya. Uno de los motivos es que los presupuestos destinan tan sólo el 18% del gasto en salud a la atención primaria, incumpliendo el 25% recomendado por la OMS y reclamado desde hace años por el sector, especialmente después de la pandemia.

La campaña 25% Atención Primaria Ya, en marcha desde mayo pasado, ha expresado su malestar en un comunicado en el que explica que la cifra anunciada supone un punto más que en 2022. Es un aumento de 279 millones de euros "necesario pero del todo insuficiente".

Las organizaciones que forman parte de la iniciativa, que son Amnistia Internacional Catalunya, Fòrum Català d'Atenció Primària (FOCAP), Marea Blanca, Medicus Mundi Mediterrània, Metges de Catalunya i Rebel·lió Atenció Primària reclamarán a los partidos que modifiquen esta cifra durante la tramitación parlamentaria, que se alargará unas semanas. Lo harán en una rueda de prensa este martes antes del inicio del pleno.

Las entidades presentarán en el Parlament 38 mociones aprobadas en varios municipios que reclaman el 25% de gasto para la atención primaria, y también mostrarán el apoyo recogido a través de más de 3.000 firmas y el apoyo de 104 entidades.

En el comunicado, las organizaciones también se hacen eco de las declaraciones de los representantes políticos que se habían comprometido a destinar el 25% a la primaria, como el propio president de la Generalitat, Pere Aragonès, su conseller de Salut, Manel Balcells, y diputados de ERC, Junts, PSC, Comunes, CUP y PP.

Durante enero, médicos y otros profesionales sanitarios hicieron huelga en Catalunya por la situación "insostenible" del sistema de salud público, con un grito de alerta especial de la atención primaria. La sobrecarga de trabajo, la falta de profesionales y el empeoramiento de la atención a los pacientes que esto comporta son algunas de las principales consecuencias de la situación. Actualmente, el 35% de catalanes deben esperar entre 10 días y un mes por una visita al centro de salud.