De forma gradual y en cuatro fases de cinco calles cada una. Así es cómo el consistorio barcelonés ha planteado la vuelta del servicio de recogida selectiva al eje del Consell de Cent una vez finalizadas las obras que se han llevado a cabo los últimos meses. Así, el primer tramo que acogerá de nuevo los contenedores es el que está entre las calles Vilamarí y Comte Borrell, donde se instalarán 15 contenedores de recogida selectiva y 14 de desperdicio. A través de los contenedores de orgánica de las calles transversales, que permanecieron allí durante los trabajos, se recupera la capacidad anterior a las obras.

Los informadores de calle, figuras fundamentales

Se prevé que la reposición total de los contenedores finalice a mediados de octubre. Hasta entonces, un equipo de ocho personas acompañará a los vecinos en el cambio de rutinas, además de informarles del nuevo funcionamiento, una tarea que iniciarán una semana antes de la llegada de los contenedores a sus ubicaciones finales, mediante actividades informativas y de monitorización. Los informadores de calle también llevarán a cabo un seguimiento de los posibles desajustes que detecten los equipos de limpieza y la propia ciudadanía.