La entidad ecologista Amics de la Terra ha presentado una queja ante la Comisión Europea por el "incumplimiento" del Govern balear de proteger el mirador de Es Vedrà, en la costa de Ibiza, que se encuentra en un estado de "degradación" por la presión humana. En un comunicado, los ecologistas acusan a la Conselleria de Agricultura, Pesca y Medio Natural de ignorar "los impactos que sufre" este espacio.

El mirador recibe a diario "centenares de visitantes" que realizan actividades y comportamientos "incompatibles" con la conservación de los valores ambientales y patrimoniales, ha señalado Amics de la Terra. 

Denuncian, entre otras cosas, el pisoteo de la vegetación, el uso de drones, la emisión de música a un volumen "que podría afectar la avifauna en época de nidificación" y la apertura de nuevos accesos "que rompen el mosaico de bosque-brezal-pastizal". 

También avisan del riesgo de incendios que pueden causar las colillas que se tiran al suelo y la contaminación de residuos de plástico, latas y excrementos. 

Desde la entidad han recordado que el espacio cuenta con un nutrido grupo de especies de fauna y flora de "interés comunitario, raras y amenazadas, algunas de ellas endémicas". Asimismo, han reiterado la preocupación expresa de los bomberos y equipos de rescate por la "frecuencia de accidentes", y algunos fallecimientos por caídas debido a descuidos o imprudencias cometidas.

En diciembre 2022, los espacios terrestres y marinos han pasado a estar protegidos en la categoría de Zonas de Especial Conservación, a través de la aprobación del Plan de Gestión Natura 2000.

Los ecologistas esperaban que con este instrumento legal las administraciones "actuarían y comenzarían a gestionar" este espacio de importancia ambiental, pero actualmente la "afluencia y presión humana sigue en aumento, con la celebración de bodas, fiestas multitudinarias y, en el último junio, la celebración de una fiesta convocada por un disc jockey con altavoces y un equipo electrónico", han concluido.