El Tribunal de Cuentas ha dictado un acta de liquidación provisional en su investigación sobre las cuentas del grupo municipal del PP de Gijón entre 2015 y 2019 en la que señala a Pablo González Menéndez, presidente del PP de Gijón y vocal de la Ejecutiva de Alberto Núñez Feijóo, como responsable, junto con otros dos exediles, del perjuicio al erario del consistorio gijonés en 8.039,64 euros, según consta en el acta, a la que ha podido acceder Público.

El Tribunal de Cuentas imputa a Pablo González, Mariano Marín y Sofía Cosmen --los tres, concejales del PP en el Ayuntamiento de Gijón entre 2015 y 2019-- la falta de justificación de 6.713,85 euros, que sumados a los intereses, arrojan la cifra que se les reclama como presuntos responsables (8.039 euros). La resolución es recurrible.

Pablo González fue nombrado en 2015 secretario general del PP en Gijón, convirtiéndose en concejal, y desde marzo de 2018 a mayo de 2019 fue el portavoz municipal del grupo popular. En la actualidad preside el partido en Gijón y forma parte como vocal de la Ejecutiva Nacional del PP. 

Las cuentas municipales, a cero

El caso estalló el 3 de marzo de 2021, cuando la interventora del Ayuntamiento de Gijón emitió un informe en el que alertaba de que entre el 2015 y el 2019, en la anterior etapa de González Menéndez como portavoz municipal, el grupo había transferido a las cuentas del partido 86.941,16 euros de fondos municipales sin justificar, según ha podido constatar Público. 

Según la interventora municipal, esas transferencias no estaban soportadas con "ninguna documentación" que acreditara "su vinculación con los fines municipales para los que fueron otorgados" los fondos. Entre ellos, como por ejemplo, el mantenimiento de la sede del PP en la ciudad, los pagos a una empresa de transporte de mercancías sin el respaldo de las correspondientes facturas, o el abono de intereses por descubierto en la cuenta bancaria. 

Además, la interventora advertía de que a fecha 6 de julio de 2019, tres semanas después de que González Menéndez dejara el cargo para ocupar un escaño en la Junta General del Principado de Asturias, la cuenta corriente del grupo había sido vaciada y se encontraba "a cero", cuando, según la contabilidad municipal, debería tener al menos 2.100 euros de transferencias del Ayuntamiento que el grupo debía abonar en concepto de cotizaciones sociales de sus trabajadores. 

Meses después, en septiembre de 2021, el Tribunal de Cuentas recibía una denuncia por el presunto vaciamiento de las cuentas del PP en el Ayuntamiento de Gijón. La firmaba la Plataforma en Defensa del Sector Marítimo Pesquero de Galicia, una organización contra la corrupción que ha traspasado las fronteras gallegas y el sector propio en el que nació. 

En noviembre, a raíz de la denuncia, el Tribunal de Cuentas ordenó elevar el caso a su sección de enjuiciamiento e investigar los hechos, a pesar de que el fiscal había pedido su archivo, al estimar que no se cumplían los requisitos "para acordar el archivo de las actuaciones".

Si bien el Tribunal de Cuentas sólo pone el foco en el dinero público sin justificar, hace constar que, en efecto, el PP se nutrió de los fondos municipales, tal y como había indicado la interventora. Además, la liquidación provisional advierte de que, además de las responsabilidades contables, la "administración irregular" de fondos públicos del Ayuntamiento de Gijón "pueda generar, en su caso, otras responsabilidades en Derecho distintas a la contable".

El caso Asturbarómetro

El escándalo por las cuentas a cero y la imposibilidad de hacer frente a las  nóminas de los trabajadores desató una tormenta interna en el PP de Asturias que tiene consecuencias judiciales. El nuevo portavoz municipal Alberto López-Asenjo alertó al partido de lo que estaba pasando en Gijón y como represalia presuntamente fue destituido. 

Para ello, los responsables del partido en Gijón se valieron presuntamente de una encuesta realizada por el Asturbarómetro, una marca de sondeos que ocultaba que su cerebro era nada más y nada menos que un tío de Pablo González. Fernando González Granda está siendo investigado en estos momentos por el Juzgado de Instrucción número 4 de Gijón por presuntos delitos contra la Hacienda Pública y falsedad en documento privado, por presuntamente haber distribuido sondeos que beneficiaban al PP y especialmente al líder del PP de Gijón y marido de su sobrina, Pablo González, que también figura como denunciado y para el que aún no se ha determinado ningún diligencia puesto que es aforado y tendría que ser el TSJ de Asturias el competente.

En la junta local del PP celebrada el 14 de septiembre de 2021, el secretario general del PP de Gijón, Álvaro Queipo, leyó los datos de una encuesta de Asturbarómetro en la que su grupo aparecía como el peor valorado del Ayuntamiento. Aquellos datos descargaron sobre López-Asenjo toda la responsabilidad y finalmente desembocaron en su destitución.

La trayectoria política de Pablo González Menéndez está llena de curvas. En su currículum asegura haberse dedicado a actividades empresariales entre 1995 y el 2002, para acceder a la corporación municipal en el 2003. Se mantuvo como edil del PP hasta el 2011, cuando renunció a su acta para integrarse en Foro Asturias, la marca electoral del exsecretario general popular y exministro del Interior de Aznar Francisco Álvarez Cascos. 

A los seis meses, sin embargo, regresó al PP, y ejerció como "consultor profesional independiente" hasta que en 2015 fue nombrado secretario general en Gijón. Ese año accedió de nuevo al ayuntamiento como concejal, y desde marzo de 2018 a mayo de 2019 fue el portavoz municipal del grupo popular. En las autonómicas de ese año accedió a un escaño en la Junta General del Principado de Asturias, y en 2021, a la presidencia del PP local. También forma parte de la ejecutiva asturiana del partido como vicepresidente de política autonómica y municipal. Feijóo lo nombró miembro de su comité ejecutivo.