Habrá un otoño caliente en el sector público del País Vasco. Este viernes, la mayoría sindical ha convocado dos jornadas de huelga en ese ámbito para los días 25 de octubre y 19 de diciembre. Los sindicatos ELA, LAB, CCOO, Steilas, SATSE y ESK, responsables de la convocatoria, denuncian que "la calidad de los servicios públicos están sufriendo un deterioro notable". UGT ha decidido quedar fuera de este llamamiento.

Los sindicatos convocantes advierten sobre "un empeoramiento de las condiciones laborales" que incide en la calidad del servicio que se ofrece a la ciudadanía y que está "directamente vinculado a la asignación presupuestaria y a la política de inversiones".

Entre otros puntos, sostienen que los convenios colectivos y acuerdos  reguladores del ámbito público llevan "más de una década sin renovarse", mientras que se registra una pérdida de poder adquisitivo acumulado de un 20% en la última década. 

Remarcan además que las "tasas de temporalidad son inaceptables",  pese a lo cual "se continúa privatizando". Según los sindicatos, en la administración pública de Euskadi "ya hay unas 100.000 personas subcontratadas".

Brecha salarial

Los sindicatos denuncian "recortes, escasez de plantilla, medidas y decisiones organizativas que perjudican la salud física y emocional de las plantillas", entre las que se encuentran el aumento de las cargas de trabajo, falta de sustituciones o ausencia de planificación del relevo generacional. Este deterioro de las condiciones de trabajo "tiene una mayor incidencia en las mujeres", alegan.

No en vano, los sindicatos advierten que "hay ámbitos altamente feminizados" y la tasa de temporalidad "es mayor entre las mujeres y las jornadas parciales están más generalizadas en los sectores y/o colectivos donde las mujeres son mayoría". La brecha salarial supera el 25%.