Las encuestas reflejan que Jaume Collboni puede ser el candidato más votado en las elecciones municipales de Barcelona. Por ello, la apuesta del PSOE ha sido cerrar la campaña electoral en la capital de Catalunya. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha arropado este viernes a Collboni junto al expresidente José Luis Rodríguez Zapatero. El mensaje de los socialistas es claro: que la ciudadanía premie sus propuestas frente a un PP sin proyecto, con insultos y que ha embarrado la política. 

Sánchez ha hecho doblete en Catalunya para el cierre de campaña. Por la mañana, en Tarragona con el candidato local Rubén Viñuales. En ambos actos ha estado presente el primer secretari del PSC, Salvador Illa. En Barcelona, además, presencia de la alcaldesa y candidata a la alcaldía de Sabadell, Marta Farrés; y la viceprimera secretaria de Organización y Acción Electoral del PSC, alcaldesa y candidata a la alcaldía de Sant Boi de Llobregat, Lluïsa Moret. 

El final de la campaña electoral ha estado marcada, o así lo ha querido el PP, por diferentes casos de compra de votos. Algunos, por cierto, afectan a los populares. Diferentes dirigentes del PP han deslizado acusaciones muy graves sobre las garantías democráticas. Sánchez no se ha referido de forma explícita al asunto durante sus intervenciones, pero sí ha dejado un mensaje muy relacionado. 

"Lo que quieren es que nos alejemos de las urnas, que no acudamos a nuestros centros electorales y por eso embarran la política, insultan, descalifican porque conocen muy bien las consecuencias del poder del voto", ha destacado en Tarragona. Sánchez ha apelado al voto socialista para premiar la "política útil" frente a una derecha sin proyecto. "¿Qué ha propuesto la derecha? Nada, aparte de crispar o insultar al adversario", ha afirmado en Barcelona.

Los logros del Gobierno han tenido su espacio, como el récord de afiliaciones a la Seguridad Social. "A España le sientan mejor las políticas socialdemócratas que las neoliberales", ha destacado, aunque lo ha calificado como "éxito de país" y no solo de su Ejecutivo.

Las referencias concretas a Catalunya han tenido un denominador común: la "convivencia". Y aquí ha asimilado a "las derechas independentistas" con la "derecha española". "Hay algunos que añoran la Catalunya de 2017, de la discordia y la división", ha destacado. Por ello, ha pedido el voto para "la mayoría" que quiere avanzar  y "nunca retroceder" en "empleo, en derechos y en convivencia. 

Para Sánchez, el PP solo tiene dos verbos. "Cuando están el Gobierno, recortar. Cuando están en la oposición: derogar. La vuelta al pasado no es un proyecto político", ha insistido el presidente ante cerca de 4.500 personas, según fuentes de la organización del PSC. El acto ha sido interrumpido durante un par de minutos por varios activistas climáticos que han gritado al comienzo de la intervención de Sánchez. 

El PSOE acaba una campaña en la que Sánchez se ha implicado todos los días, así como sus ministros. Las expectativas socialistas son mantener la mayoría de poder territorial, habida cuenta de que gobiernan en 9 de las 12 comunidades autónomas que tienen cita con las urnas el 28 de mayo. A nivel municipal, aparte de Barcelona, tienen muchas expectativas puestas en València y en el resultado global. 

Zapatero ironiza con Feijóo

Antes del actual líder socialista ha intervenido el expresidente Zapatero, recibido con múltiples halagos por el público y el resto de dirigentes. Al son de la canción "Defender la alegría", de Joan Manuel Serrat, que acompañó su campaña de 2008, ha subido al escenario. "Tenía ganas de decir algunas cosas", ha comenzado su intervención.

Ha ironizado con que el PP está esperando la llegada de un OVNI para echarle la culpa de Pedro Sánchez. Y ha calificado al líder de los populares, Alberto Núñez Feijóo, de "vacío de discurso y propuestas". "Espero que no le pase lo mismo que a Casado y que llegue a las generales", ha añadido.

Zapatero ha reivindicado, de la misma manera que hizo hace un mes en València, las políticas concretas de Sánchez en Catalunya, indultos incluidos, para "pacificar" el territorio. Además, en su confrontación con la derecha, ha apuntado que al PSOE "no le va a intimidar el PP". "Tenemos al Gobierno que ha hecho la mayor política social de toda la democracia", ha sentenciado.