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La mujer que financió desde València a los terroristas de Dáesh se declara culpable y acepta cinco años de cárcel

Cristina Amparo Bomboi envió 2.860 euros a los combatientes del 'Estado Islámico' en Siria, tras un proceso de radicalización que la llevó a "abrazar la fe islámica".

Cristina Amparo Bomboi, este miércoles en la Audiencia Nacional
Cristina Amparo Bomboi, este miércoles en la Audiencia Nacional. A.N.

Cristina Amparo Bomboi, la mujer que realizó labores de financiación en beneficio de los terroristas de Dáesh, después de sufrir un proceso de radicalización religiosa al que llegó después de "abrazar la fe musulmana", se ha declarado culpable este miércoles y ha aceptado cinco años de cárcel. 

Nada más empezar el juicio en la Audiencia Nacional, la acusada, valenciana, ha reconocido los hechos de los que le acusaba el Ministerio Fiscal, que pedía para ella cinco años de prisión, una multa de 18.640 euros por un delito de financiación de organización terrorista e inhabilitación absoluta para empleo y cargo público durante 11 años. 

Bomboi, que permanece en prisión desde noviembre de 2020 cuando fue detenida en la localidad valenciana de Cullera, comenzó su radicalización en 2016. Ese proceso le llevó a "posicionarse en las redes sociales con algunos mensajes de elogio o justificación de las acciones cometidas por miembros de organizaciones del terrorismo yihadista", según consta en el escrito de la Fiscalía. 

Además de enaltecer a esos grupos, decidió ayudar a los combatientes del Estado Islámico en Siria de manera económica. Para ello, realizó diez transferencias través del sistema de pagos internacionales Transferwise, a través del cual envió un total de 2.860 euros vía Turquía, a través de un intermediario

En su teléfono móvil, Bomboi guardaba imágenes de mujeres vestidas con niqab empuñando fusiles 'Kalashnikov' y grupos de personas mostrando el símbolo de Dáesh. 

Además, los investigadores hallaron en su teléfono capturas de una videollamada entre la propia Bomboi y uno de los soldados a los que envió el dinero. En la misma podía observarse a este hombre dentro de una instalación de combate en la que se veían armas de guerra.

En una de esas llamadas un hombre aseguró a Bomboi que un contrabandista podría llevarla hasta Siria, preguntándole cuándo podría estar allí. La propuesta finalmente decayó porque la acusada no disponía de la cantidad reclamada para hacer el viaje.

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