Manuel Valls, concejal del Ayuntamiento de Barcelona por Barcelona pel Canvi y exprimer ministro francés, 92.000 euros brutos de sueldo anual por reprensentar a los barceloneses, está pasando el confinamiento en su segunda residencia en Menorca, isla a la que llegó el pasado 12 marzo, dos días antes del inicio del estado de alarma que desde entonces tiene confinada a la población, pero sí cuando el Gobierno ya pedía limitar al máximo los desplazamientos y recomendaba quedarse en casa. 

La noticia ha sido avanzada por la radio francófona de Barcelona Equinox. Citando fuentes del entorno de Valls, eldiario.es informa de que Susana Gallardo, la mujer del político francés afincado en España, dispone en la isla de una segunda residencia a la que el matrimonio acude regularmente.

Así lo hicieron el 12 de marzo. Desde entonces, aseguran esas fuentes del entorno del político, Valls se ha reunido telemáticamente con los miembros de su grupo municipal. Además, añaden esas mismas fuentes, Valls viajó a Menorca antes del confinamiento e insisten en que no ha infringido ninguna norma. 

Valls no es el primer político que pasa el confinamiento en su casa de veraneo: el matrimonio formado por José María Aznar y Ana Botella viajaron el 11 de marzo, a Marbella para pasar unos días en su chalet y ahí siguen.

Curiosamente, el pasado día 5 de abril Valls recordaba en Twitter a los franceses la buena actitud de los españoles y los italianos, quienes masivamente respetan el confinamiento para frenar la pandemia de la COVID-19.

Valls colgío en las redes sociales la imagen de una televisión francesa en la que se veía a numerosas personas andando juntas ayer por las calles de Marsella y en la que se incluía un titular que informa de que, en esa ciudad y en París, muchos no habían respecto el sábado la orden de confinamiento.

"Increíble", exclamaba ante esa imagen Valls, quien recordaba a a los franceses que en España e Italia las personas viven también unas reglas de confinamiento pero que las respetan más "para salvar vidas", por lo que les recomendaba quedarse en casa poniendo la etiqueta "restezchezvous" ("quédense en casa").