La eurodiputada de Podemos, Irene Montero, ha acusado al Gobierno español de cometer una grave violación de los derechos humanos al denegar el asilo a varios saharauis retenidos en el aeropuerto de Barajas, señalando que esta decisión está motivada por la "complicidad" del Ejecutivo con el régimen dictatorial de Marruecos.

Montero se ha desplazado este viernes a la Terminal 1 del aeródromo madrileño junto a Isa Serra para intentar entrar a las dependencias donde se encuentran los solicitantes de asilo, en su condición de eurodiputadas, con el objetivo de comprobar de primera mano la situación en la que se encuentran, dado que sospechan que padecen condiciones de insalubridad.

La exministra de Igualdad ha recalcado que solicitaron amparo a la presidenta de la Eurocámara, Roberta Metzola, para que se le facilitara el acceso a dicha sala, una vez que no se permitió la entrada el pasado lunes a la secretaria general de su partido, Ione Belarra.

Montero ha denunciado ante los medios que el Gobierno español está obstaculizando sus funciones como eurodiputadas al no permitirles visitar a los solicitantes de asilo. Ha criticado al Ejecutivo de Pedro Sánchez por actuar de manera similar a lo que cabría esperar de un gobierno del Partido Popular.

La eurodiputada ha preguntado si esta negativa a acceder al lugar se debía a la cercanía del Gobierno español con Marruecos, lo que estaría contribuyendo a vulnerar los derechos de los saharauis. Además, ha señalado que estas acciones son incompatibles con los principios de un gobierno progresista.

Montero y Serra querían constatar lo que consideran una violación de derechos humanos por parte del Gobierno, al negar asilo a los saharauis retenidos, quienes ahora enfrentan la posibilidad de ser deportados a Marruecos.

"Ahora mismo hay personas que están enfermas, niños que necesitan atención médica urgente y, sobre todo, son solicitantes de asilo. Son posiblemente las personas más vulnerables cuando alguien tiene que huir a consecuencia de luchar para conseguir un mundo mejor y cesen las violaciones de derechos", ha zanjado la exministra.

La abogada de los retenidos, Fátima Fadel, ha subrayado que entre los saharauis hay menores y personas enfermas, y que 25 de ellos se encuentran en huelga de hambre, lo que agrava aún más su situación.

Fadel ha exigido al Gobierno español que no deporte a estos ciudadanos saharauis a Marruecos, argumentando que dicho país no tiene legitimidad para recibirlos, ya que ocupa de forma ilegal su territorio. Además, ha recordado que se ha solicitado el reconocimiento de estatuto de apátrida para ellos, sin recibir aún respuesta por parte del Ministerio del Interior.

El Ministerio del Interior había anunciado el lunes la orden de devolución de diez de los saharauis a Marruecos, pero la defensa del grupo asegura que todos ellos siguen retenidos en la sala de la terminal junto al resto de sus compañeros.