"Mi padre maltrataba a todos". Son las palabras de una de las hijas del matrimonio de la localidad madrileña de Colmenar Viejo acusado de maltratar a sus ocho hijos. La pequeña, de siete años, ha explicado en sede judicial que su madre no le pegaba a ella ni a sus hermanos, pero su padre sí. La menor ha señalado que su progenitor, médico de profesión, insultaba a su mujer, a la que llegó a agarrar del cuello.

El Juzgado de Instrucción número 4 de Colmenar Viejo ha tomado declaración este jueves a tres de las víctimas, cuyo testimonio ha quedado grabado como prueba preconstituida de cara al posible juicio por los hechos que se destaparon el pasado mes de marzo tras la denuncia de la hija mayor del matrimonio.

En su declaración, la menor ha asegurado que contó lo que pasaba en su casa a tres profesores del colegio. La pequeña ha relatado episodios en los que su padre la castigaba sin dormir. También ha explicado que llegó a cortarle la cara con un cuchillo cuando tenía cuatro años, según recoge la Cadena Ser. Del mismo modo, ha señalado que su progenitor se enfadaba especialmente con sus dos hermanas mayores porque no quería que usaran WhatsApp.

Las otras dos menores a las que se ha tomado testimonio este jueves han referido que no recordaban bien lo que pasaba en su casa, aunque sí han explicado que su madre no les maltrataba. Las hermanas de estas niñas que declararon hace días en el juzgado también relataron malos tratos del padre hacia los hijos, según recoge Efe.

El médico y su esposa se encuentran en libertad provisional tras ser detenidos a finales del pasado mes de marzo. El investigado es médico de urgencias del Hospital Gregorio Marañón de Madrid y sigue en activo. 

Hace unas semanas, el magistrado ordenó que se levantara la orden de alejamiento impuesta al investigado respecto a su mujer por violencia de género, una decisión recurrida por el fiscal, que advirtió del riesgo que sufre la mujer. De hecho, desde que se retiró la orden de alejamiento, el matrimonio ha vuelto a convivir, pero tienen retirada la patria potestad de sus ocho hijos, de entre cuatro y 14 años, que están a cargo de los servicios sociales.