La Guardia Civil ha incluido el 'off the record' de Irene Montero publicado este lunes en ABC en un nuevo informe entregado a la jueza del caso del 8-M, Carmen Rodríguez-Medel. El documento, con fecha del 1 de junio también, recoge las palabras de la ministra de Igualdad, en la que decía una obviedad a cuenta de la bajada de participación en la manifestación del 8 de marzo.

Tal y como ha avanzado El País, el instituto armado se hace eco de la publicación de ABC para justificar la supuesta repercusión del acto del 8-M en la propagación del coronavirus y la posible responsabilidad del Gobierno, hechos enmarcados en la causa por la que se encuentra imputado José Manuel Franco, el delegado del Ejecutivo en Madrid.

La ministra Irene Montero, en una conversación con una periodista de EiTB, dijo que "la bajada de cifras el 8-M fue debido al coronavirus", unas palabras poco reveladoras que, sin embargo, algunos medios y la oposición han tratado de convertir en noticia, y que ahora han sido utilizadas por la Guardia Civil para demostrar la supuesta negligencia del Gobierno al permitir la convocatoria feminista.

Siempre según este medio, este nuevo informe mantiene las acusaciones anteriores, aunque admite alguno de los errores del primer documento, el cual contiene además testimonios manipulados y omite información clave. Así, reconoce que la la Organización Mundial de la Salud (OMS) no declaró la pandemia hasta el 11 de marzo, tres días después del 8-M, después de que la Benemérita hubiera errado con varias fechas en el anterior informe, incluida esta. 

Paralelamente a estos documentos, la magistrada maneja también el informe del médico forense adscrito al Juzgado de Instrucción número 51 de Madrid, el cual constata que, aunque es "cierto y seguro" que, de haberse impedido la manifestación del 8-M en Madrid, "se habría evitado una amplia difusión de la enfermedad", no existe "relación de causalidad" entre acudir a una concentración multitudinaria y los contagios por coronavirus.

La filtración del primer documento provocó el cese del jefe de la Guardia Civil en Madrid, Diego Pérez de los Cobos, y la dimisión del Director Adjunto Operativo de la Guardia Civil, Laurentino Ceña. Estos hechos han desatado una nueva tormenta política que sitúa al ministro de Interior, Fernando Grande Marlaska, en el ojo del huracán.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, respaldó este miércoles en el Congreso de los Diputados al titular de Interior, a quien le ha encomendado ahora acabar con la denominada "policía patriótica", cuya creación atribuyó el propio Sánchez al anterior Gobierno del Partido Popular.