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Los grupos minoritarios del Senado temen que el cara a cara de Sánchez y Feijóo sea una "escenificación del bipartidismo"

La comparecencia del presidente del Gobierno, entendida como un duelo con el líder de la oposición, hace sonar las alarmas entre los senadores, que hasta ahora solo habían presenciado un debate similar en toda la legislatura.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en una sesión de control al Gobierno en el Senado. RICARDO RUBIO/EUROPA PRESS
El presidente del Ejecutivo, Pedro Sánchez, en una sesión de control al Gobierno en el Senado. RICARDO RUBIO / EUROPA PRESS

Ni en esta legislatura ni en las anteriores ha sido habitual que el presidente del Gobierno comparezca en el Senado como sí lo es, en mayor o menor medida, en el Congreso. Desde hace tiempo, la utilidad de la Cámara Alta, "la Cámara de representación territorial", según recoge el artículo 69 de la Constitución, está en entredicho dada la celeridad de los trámites parlamentarios de la mayoría de las iniciativas legislativas.

Los senadores de los grupos, especialmente de las fuerzas minoritarias (algunas de ellas sin representación en el Congreso), reivindican siempre que tienen la oportunidad el papel que les ha otorgado la ciudadanía mediante las urnas. Ante el "ninguneo" político y mediático al que son sometidos, representantes de la Cámara Alta valoran de forma positiva la comparecencia del presidente del Gobierno, Pedro Sáncheza iniciativa propia (aunque después de que los populares la hubieran solicitado) para informar sobre el plan de ahorro energético y su perspectiva territorial, así como del contexto económico y social del mismo.

"Es una magnífica noticia que Sánchez haya decidido venir al Senado a debatir porque rompe una dinámica que se había dado tanto en esta legislatura como en las anteriores, ya que PP y PSOE siempre han coincidido en intentar ningunear al máximo el tramite parlamentario en esta cámara", señala el senador de Más Madrid, Pablo Gómez Perpinyà, en relación a la cita de este martes. 

Sin embargo, ante el contexto que rodea la comparecencia, entendida como un cara a cara entre el presidente del Ejecutivo y el líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo, con asiento en el Senado y no en el Congreso, así como las expectativas creadas en torno a ella (al tratarse de una comparecencia, ambos podrán debatir durante más tiempo), el resto de portavoces de los grupos, especialmente de los minoritarios, temen que la cita se convierta en una "escenificación del bipartidismo", tal como apunta el representante de Compromís en la Cámara Alta, Carles Mulet.

"[La cita parlamentaria] se centrará en un cara a cara, en la intervención de Sánchez y en la réplica a Feijóo. Como el resto de grupos no somos conocidos, pasaremos más inadvertidos. Nuestro papel es secundario, así que intentaremos sacar la cabeza en los cuatro minutos que tengamos para intervenir", avanza este senador en una conversación con Público.

Y es que, además, de los 265 representantes de la Cámara Alta, solo entre PSOE (113) y PP (104) suman 217 senadores. Por lo tanto, los portavoces de las otras 17 fuerzas políticas integrados en hasta seis grupos diferentes deberán repartirse los 15 minutos más cinco de réplica de los que disponen.

Frente a estas expectativas, el senador de Más Madrid confía en que haya "un debate de ideas, y que tanto Sánchez como Feijóo tengan la altura política suficiente para no embarrar el debate de insultos y descalificaciones personales que no representan el trabajo político que nos ha encomendado la ciudadanía", añade.

En esta línea se pronuncia el representante de Geroa Bai, Koldo Martínez. "Espero que sea un debate ideológico, de propuestas, que no sea como otros, que son un cruce de insultos", señala para después anticipar el foco de su intervención de este martes ante Pedro Sánchez. "La crisis energética es el problema más urgente, pero el problema más grave es la desigualdad creciente porque es estructural, viene de años atrás y está desbocada a pesar de las medidas que ha tomado el Gobierno", remacha el senador perteneciente al grupo de Izquierda Confederal.

Reivindicación territorial

Hasta ahora, más allá de las sesiones de control en las que el presidente del Gobierno interviene solo una vez al mes (salvo que este no pueda acudir por cuestiones de agenda), Sánchez solo había comparecido en el Senado al principio de la legislatura (en septiembre de 2020 en el contexto de la pandemia). Por ello, el senador de Teruel Existe, Joaquín Egea, pide "aprovechar la oportunidad" que brinda el debate de este martes para demostrar que el Senado "tiene su vigencia e importancia".

El integrante del grupo parlamentario democrático recuerda además que el Senado, como cámara de representación territorial, "tiene mucho que decir" en un contexto de crisis energética agravada por la guerra en Ucrania. "Hemos visto cómo algunas medidas son aplaudidas en unos territorios y en otros no por la idiosincrasia de los propios territorios", como los abonos gratuitos de Cercanías, Rodalies y Media Distancia: "Básicamente porque en la España Vaciada no los tenemos", apostilla Egea.

Por su parte, socios parlamentarios del Ejecutivo, cuyo papel cobra mucha más fuerza y presencia mediática en el Congreso, como ERC, PNV o EH Bildu, encaran la comparecencia de Sánchez en el Senado con la "máxima exigencia" a pesar de que "el debate entre Sánchez y Feijóo es puro marketing", según comentan fuentes republicanas de la Cámara Alta.

Desde EH Bildu avanzan que su portavoz pedirá al Gobierno lo mismo que la coalición abertzale reclama desde su escaño en el Congreso: "Que actúe con mayor valentía para actuar con una mirada a medio y largo plazo que permita acometer cambios y tomar medidas más profundas y ampliar así el alcance de las políticas de transición energética", apostillan fuentes de la formación política.

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