El Gobierno Vasco solo permitirá las reuniones de hasta un máximo de diez personas en una terraza de un bar o una cafetería pero no en los domicilios particulares. Estas medidas convierten a Euskadi en la comunidad autónoma con mayores restricciones implantadas, sobre todo en cuestiones de movilidad, al estrenar este lunes la fase 1 de la desescalada.

En Gipuzkoa, Bizkaia y Álava las reuniones en viviendas tendrán que esperar mínimo dos semanas más, a diferencia de otras provincias que también se encuentran en el mismo escenario de la desescalada. 

El Departamento vasco de Seguridad ha presentado esta medida en una hoja informativa en la que explica los nuevos criterios de aplicación de la Ertzaintza y las Policías locales de Euskadi en relación con la entrada en la fase 1 del plan de desescalada. 

Esta decisión ha generado gran confusión ya que en la última actualización de los criterios de aplicación de la alerta sanitaria, esta nueva normativa no aparecía en el Boletín Oficial del País Vasco (BOPV), aun siendo aprobada por el Gobierno central. 

La consejera de Seguridad, Estefanía Beltrán de Heredia, ha recalcado que "tampoco se podrá reunirse en una sociedad o txoko... diez jóvenes no se pueden reunir en una plaza pero sí en una terraza de un bar o una cafetería y con el aforo limitado al 50%".

Además, estos encuentros deben de ser "ocasionales" y "con unas condiciones de distanciamiento de dos metros entre las diferentes personas", recalca Beltrán de Heredia.

Otras restricciones de movilidad y cultura

En el apartado de movilidad y libertad de circulación, el Ejecutivo vasco también ha dispuesto que las personas podrán desplazarse dentro del término del municipio en el que tengan fijada su residencia, sin limitación de distancias.
Se permite la movilidad entre municipios colindantes de tránsito habitual para la realización de actividades socio económicas aunque se recomienda limitar al máximo la movilidad fuera del municipio de residencia.

Fija algunas excepciones. Así, las personas podrán desplazarse entre los tres Territorios Históricos de Euskadi por motivos sanitarios, laborales, profesionales o empresariales, así como por retorno al lugar de residencia habitual, causas educativas y formativas, de visita y por cuidado y atención a familiares que sean personas mayores, dependientes, con discapacidad o en situación de necesidad.

En el ámbito deportivo, se podrá realizar actividad física y deportiva dentro del municipio en el que se tenga fijada la residencia "y en los colindantes". Y a diferencia de en otras zonas que también entran en la fase 1, en Euskadi las bibliotecas, museos, locales y establecimientos en los que se desarrollen actos y espectáculos culturales permanecerán cerrados.

Las comunidades que poseen todo el territorio o alguna provincia ancladas en la fase 0 han denunciado un "trato de favor"  por parte del Gobierno central a Euskadi afirmando que "no estaba preparada" para avanzar de etapa.

A esta queja se le suma también partidos como el PP, EH Bildu y Podemos en Euskadi, que tras asegurar que la comunidad no estaba bajo el barómetro establecido para el cambio de fase, apuntan que Urkullu está preparando terreno para la celebración de las elecciones autonómicas en julio.

El lehendakari se ha defendido de las críticas afirmando que estas nuevas normativas se basan en "restricciones acordadas con el Gobierno español" en relación con "un plus de prudencia y seguridad, con disciplina en el rigor científico y con una perspectiva de progresividad".

No obstante, según el director del Centro de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, ha afirmado que desde el Ejecutivo se desconoce estas nuevas medidas por parte del Gobierno Vasco y que entienden que "todo Euskadi estaba en situación de pasar de fase".