MADRID.- El diputado valenciano de Compromís, Joan Bardoví, ha sufrido una repentina subida de tensión en plena intervención durante la segunda jornada del debate del estado de la nación que le ha impedido seguir hablando desde la tribuna. El propio Baldoví ha sido consciente de lo que le ocurría y ha buscado sentarse en un escalón junto a la tribuna de oradores mientras que la presidenta ocasional, Celia Villalobos, lanzaba un grito: "¡Un médico!".

El parlamentario de la coalición nacionalista valenciana ha sido atendido inmediatamente por los servicios médicos de la Cámara baja y por varios parlamentarios médicos, entre ellos la socialista Carmen Montón. El diputado de IU Gaspar Llamazares también se ha acercado al lugar donde estaba siendo atendido. Tras permanecer unos minutos tumbado en el suelo, junto a la presidencia de la cámara, ha sido trasladado a la enfermería de la institución parlamentaria donde estaba siendo atendido en el momento de redactar esta noticia a la espera de ser trasladado en ambulancia a un hospital.

"Padece de tensión alta", ha dicho a Público un asistente de Compromís. Fuentes médicas consultadas por este periódico han confirmado que Joan Baldoví había tomado un medicamento para rebajar la tensión nerviosa. "Ha sufrido una fuerte subida de tensión, pero el electrocardiograma que se le ha realizado descarta que haya sufrido un infarto", explicaron las citadas fuentes. El propio diputado tranquilizaba a través de Twitter asegurando que se encontraba "bien", al tiempo que agradecía la preocupación que ha despertado su desvanecimiento. 

El cuadro que presentaba tras ser atendido denotaba un malestar generalizado, sudoración y vómitos mientras era trasladado a la enfermería del Congreso. Aunque su estado no despertaba gran preocupación en los servicios médicos se ha optado por su traslado a un centro hospitalario a la vista de que su estado no se estabilizaba con el paso del tiempo.

Baldoví intervenía desde la tribuna mostrando unos papeles en los que representaba, folio a folio, un abecedario para describir los efectos perniciosos de las políticas del Gobierno de Rajoy. Iba por la E de emigración cuando ha sentido el malestar.

No es la primera vez que un parlamentario sufre un desvanecimiento en plena tribuna de oradores. Hace quince años el diputado de Nueva Izquierda por Alicante, Manuel Alcaraz, sufrió una bajada de tensión mientras intervenía en una sesión plenaria que le obligó a interrumpir su parlamento y ser atendido en pleno estrado.