La derecha alienta otro 12 de octubre caliente contra Pedro Sánchez. Los abucheos e insultos al presidente del Gobierno en funciones en el día de la Fiesta Nacional por parte de una minoría de la derecha más reaccionaria han sido habituales durante toda la legislatura —como le sucedía a José Luis Rodríguez Zapatero cuando era presidente— y forman parte de lo previsible para el desfile de este jueves, teniendo en cuenta además que este 12-O llega en un momento de máxima tensión política, con unas negociaciones de investidura en marcha y la ofensiva de PP y Vox en frente. 

Lo dejaron claro desde las filas socialistas el pasado lunes tras la reunión de Sánchez con el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo. Según señalaron, el "PP está intentando hacer una instrumentalización partidista de la Fiesta Nacional del 12 de octubre". Y así se lo dijo durante su encuentro. Feijóo respondió que "ya le silbaban" cuando él acudía al acto como presidente de la Xunta.

Pero, mientras el PSOE cargaba contra los populares y le pedía contención en "su intento desesperado por agitar las calles", en relación a las manifestaciones realizadas tanto en Catalunya como Madrid en contra de la ley de amnistía, los populares se abonaban cada día más a esa estrategia, convencidos de que esa es su plaza ganadora. "Ahora la calle es nuestra", defendió este martes Elías Bendodo, coordinador general del PP. 

Este miércoles fue a más y defendió que era "muy importante" saber encajar "las palmas y los pitos". "Sánchez, por su soberbia extrema, solo admite a los palmeros y ahora se está dedicando a culpar a la pitada que previsiblemente le van a dar mañana", apuntó. Y, enmendándose a sí mismo solo 24 horas después, añadió: "La calle no es patrimonio de nadie".

Génova espera ruido y abucheos a Sánchez frente a un Feijóo que exhibirá poder territorial—aunque su condición ahora, a la espera de convertirse en líder de la oposición de nuevo, sea únicamente la de candidato más votado—, ya que 12 de los 17 presidentes autonómicos que presenciarán el desfile son del PP. En Moncloa tienen un diagnóstico que no es nuevo. 

"Si no gobierna el PP la Fiesta Nacional es la fiesta del insulto"

"Cada vez que en este país no gobierna el PP la Fiesta Nacional deja de ser la fiesta de todos para ser la fiesta del insulto", destacó la portavoz en funciones, Isabel Rodríguez, durante la rueda de prensa habitual tras el Consejo de Ministros.

Fuentes de la dirección socialista en Ferraz destacan a Público que "el PP calienta la calle previamente al 12 de octubre y luego dice que no le gustan los silbidos". "La Fiesta Nacional es de todos. Nadie es más español que nadie, y nadie reparte carnés de constitucionalista como hace el PP, mientras no cumple la Constitución", señalan en el PSOE.

Los socialistas piden a los populares que tengan una "postura clara y contundente contra los que ensucian el día de todos con actitudes de mala educación". No lo hacen, según el PSOE, porque lo promueven difamando a diario al Gobierno y al propio Sánchez. "Lo llevamos diciendo tiempo, el PP lleva las siglas azules, pero su alma hace tiempo que es verde Vox", sentencian en el partido.