La campaña en Castilla y León entra ya en la última semana y los rivales aseguran que el presidente Alfonso Fernández Mañueco, candidato del PP, partido que lleva 35 años gobernando, tiene "miedo" y está "sudando de nervios". Este, que se ha quedado sin el aliado de los últimos años, Ciudadanos, cuyo candidato, Franciso Igea, su exvicepresidente, quien arremete con todo contra él, juega la carta de la recuperación del voto al PP.

El experimento de Mañueco, quien decidió convocar los comicios en solitario por primera vez en una Comunidad Autónoma que siempre ha elegido al mismo tiempo a los alcaldes, está por ver cómo le sale.

El ministro Alberto Garzón se estrenó este sábado en la campaña y en un acto en Burgos cargó con todo contra el presidente de Castilla y León de quien dijo que era el candidato investigado por la Fiscalía, en referencia a la denuncia ante el Tribunal de Cuentas por la financiación del partido en Salamanca, y que tienen "miedo" porque son conscientes de que la "operación de bulos", "mentiras" e "intoxicación" para proteger a las macrogranjas y "arrodillarse" ante la "extrema derecha" de Vox les saldrá "mal" en estos comicios, según recoge Europa Press.

A su lado, el candidato de Unidas Podemos, Pablo Fernández, fue duro con Mañueco: "Ha permitido y amparado la corrupción en Castilla y León y en España". Fernández afirmó que la convocatoria de estos comicios, por sorpresa, escondían la intención de "eludir y evitar el acoso judicial": "A partir de marzo van a empezar a desfilar por los juzgados altos cargos del PP que están inmersos en varias macrocausas de corrupción en esta Comunidad".

El PSOE, a la espera del desembarco este domingo de Pedro Sánchez y José Luis Rodríguez Zapatero, trata de explotar una imagen presidencial de Luis Tudanca. Este sábado, seis presidentes autonómicos –Asturias, Adrián Barbón; Aragón, Javier Lambán; Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page; Navarra, María Chivite; La Rioja, Concha Andreu y Extremadura, Guillermo Fernández Vara; faltaron otros tres– lo arroparon en un acto en Segovia. Tudanca respondió al llamado reivindicando otra política para Castilla y León. "Vamos a darle futuro a esta tierra, a ganar por más, a darle a esta tierra el gobierno que necesita y merece", dijo. Tudanca acusó a Mañueco, de no sentirse "responsable de nada de lo que pasa en Castilla y León". Y proclamó: "Yo sí quiero hacerme cargo de esta tierra con decencia, corazón, empatía y mirada limpia, nada me es ajeno".

"Todo el mundo sabe que la convocatoria electoral tiene que ver con las órdenes y las batallas de Génova y con el pavor que le producían los casos de corrupción que se están investigando. [Hoy] se ha "conocido una nueva: que la Fiscalía ha pedido al Tribunal de Cuentas que investigue la financiación ilegal del señor Mañueco, de las primarias que le llevaron a ser elegido candidato a la Junta de Castilla y León", dijo Tudanca, en declaraciones recogidas por Europa Press.

"¿Pero vamos a seguir más tiempo viendo cómo manchan nuestras instituciones? –se preguntó– Esos son los dos motivos que justifican esta campaña electoral, no hay más". "No albergo ninguna esperanza de que, cinco días antes de las elecciones, asuma las responsabilidades que no ha asumido en años", remachó.

Tudanca consideró que Mañueco "no hará nada" y que el PP "debería marcharse", aunque "esto no es de hoy": "Nunca han asumido ninguna responsabilidad sobre la corrupción y eso se tiene que acabar, no puede ser que tengan a ex altos cargos de la Junta con juicio oral abierto y peticiones de pena en la trama eólica de 138 años de cárcel. Me parece intolerable".​

Miedo

Igea, que volvía al ruedo después de guardar la cuarentena pertinente tras su contagio por covid, recibió la visita de Inés Arrimadas y del vicepresidente de la Junta de Andalucía, Juan Marín. Arrimadas afirmó que ve "sudando de nervios" a Mañueco, quizás por miedo a los jueces". Arrimadas añadió que, a su juicio, el presidente está arrepentido de su "puñalada" a Castilla y León, cuando convocó las elecciones "con mentiras", añadió la presidenta de Ciudadanos.

Igea abundó en la idea del "miedo" de Mañueco con una broma. Si uno de los síntomas de la covid, dijo, es la pérdida de olfato, él ya está en condiciones de oler la esperanza y también "a kilómetros de distancia" el "miedo" que sienten, en su opinión, los "irresponsables" que convocaron estas elecciones, que ve marcadas "por la deshonestidad, por la mentira y por la difamación". Igea afirmó que, lejos de rendirse, estos comicios pueden ser una oportunidad para su partido, que corre un riesgo real de desaparecer.

Mañueco, en respuesta a las encuestas, a las cábalas, a los golpes de sus rivales y al crecimiento de Vox, llamó en Segovia a aglutinar todo el voto en su partido: "O Partido Popular, o Partido Popular, no hay más cáscaras". El presidente añadió: "Vamos a tener un gobierno en solitario, pero para eso necesitamos la movilización de las personas". Luego, pidió "no hacer caso" de las encuestas, ni de las que ofrecen un resultado positivo para el PP, que "desmovilizan", ni tampoco de las que dibujan un panorama menos favorable, pues "buscan desmoralizar a nuestros votantes".