El coordinador general de Izquierda Unida, Cayo Lara, ha advertido este lunes que "quien vote a corruptos se convierte en cómplice de la corrupción", así como que, si España "no gira a la izquierda, este país pierde".

"Un partido que, más que un partido, es una suma de bandas organizadas para trincar, no puede ser que siga gobernando los destinos de Baleares", ha declarado durante una rueda de prensa en Palma acompañado del coordinador de EU en Baleares y cabeza de lista de Guanyem al Parlament, Manel Carmona, donde también ha hecho hincapié en la "necesidad vital de sustituir los Gobiernos del PP", incluyendo sus "mandos a distancia" que son las alcaldías y CCAA gobernadas por los 'populares'.

Lara también se ha referido al expresidente del Govern, Jaume Matas, "hombre de plena confianza de Rajoy", y ha recordado que el PP ha sido "una suma de bandas organizadas". El PP, ha dicho, se ha financiado de manera ilegal durante 18 años. "Quien vote a corruptos se convierte en cómplice de la corrupción, no son cuatro garbanzos negros, son bandas organizadas para delinquir", ha añadido.

Reunión con Gestha  

Por otro lado, Lara se ha referido a la reunión previa que ha mantenido con el sindicato Gestha y ha explicado que únicamente el 20 por ciento de los agentes de la Agencia Tributaria se dedican a controlar "el alto fraude fiscal" pese a que éste llega a 80.000 millones, el 8 por ciento del PIB en España, cuando la media europea está en cuatro puntos.

En este sentido, Carmona ha explicado que el "mayor expolio que sufre Baleares es el fraude fiscal", al estar cifrado en 6.400 millones de euros. Por ello, si se redujese a los niveles europeos, se recaudarían 300 millones de euros para los presupuestos de las Islas.

"Necesitamos que el nuevo Govern tenga valentía, determinación y coraje para perseguir este fraude fiscal, poniendo en marcha unidades de coordinación entre Govern y Agencia Tributaria, para perseguir el fraude fiscal con recursos suficientes", ha declarado Carmona.

El candidato de Guanyem también ha declarado que probablemente haya 1.000 millones de euros en Baleares "en fase de ejecución de morosidad que no se están recaudando". Además, ha recordado su propuesta para que cada turista abone dos euros por pernoctación y esta cantidad se destine a "revertir los recortes".