El cesado vicepresident del Govern y hasta este miércoles conseller de Territori i Polítiques Digitals, Jordi Puigneró, es uno de los hombres de confianza del expresident de la Generalitat, Carles Puigdemont. Pero no fue primer plato para este importante cargo.

Como mínimo fue el cuarto que se sepa tras el rechazo a ejercer la vicepresidencia del Govern de la presidenciable de Junts, Laura Borràs, que optó por la presidencia del Parlament y también de dirigentes con peso específico en Junts como Elsa Artadi y Josep Rius, dos perfiles también cercanos a Puigdemont.

La necesidad de situar al frente de los consellers de Junts a alguien de confianza de Puigdemont puso a Jordi Puigneró en la rampa de salida para ocupar la vicepresidencia del Ejecutivo, que le corresponde a JxCat según el acuerdo para la investidura de Aragonès como president de la Generalitat.

Puigneró ya se había ocupado de la cartera de Políticas Digitales en la anterior legislatura bajo la presidencia de Quim Torra. Se dice que Puigneró ya mantenía entonces una relación más estrecha con Puigdemont que con el propio Torra y despachaba más en Waterloo que en la plaça Sant Jaume.

Nacido en Sant Cugat del Vallès (Barcelona) en 1974, Puigneró no ha conseguido ser el contrapeso de JxCat a Aragonès que esperaban en el partido. Entre otras cosas por su poca influencia dentro del partido donde no tiene ningún cargo directivo de importancia.

Con la retirada de Puigdemont de la presidencia de Junts, Puigneró perdió peso
político e influencias en Junts y en las últimas semanas ha intentado una aproximación con el sector de Laura Borràs, probablemente con la intención de ejercer como correa de transmisión de la presidenta de Junts en el Govern.

Pero unirse a la beligerancia de Borràs contra ERC le ha comportado más de un encontronazo con el president Aragonès. La más visible fue después de la Diada con su aval a la propuesta de la ANC de volver a declarar la independencia dentro de un año, justo después del rechazo de Aragonès a la misma.

Puigneró, autor del libro El cinquè poder. La República digital a les tevés mans (El quinto poder. La república digital en tus manos) (La Campana), procede del sector independentista de la antigua Convergència, donde ya se forjó un perfil muy ligado al independentismo.

A veces con un cierto nacionalismo catalán exacerbado como las polémicas suscitadas por avalar teorías de pseudohistoria del autodenominado Institut Nova Història. Un grupo de historiadores que defienden que personajes como Cervantes o Colón, entre otros, eran catalanes pero desde España se ha falseado la historia para atribuirles españolidad.

Por otra parte en Junts se le valora especialmente por sus conocimientos en el ámbito de la ciberseguridad. De hecho, fue el encargado de coordinar la defensa frente al ciberataque que sufrió la Generalitat durante la consulta soberanista del 9N de 2014, una función que también desempeñó durante el referéndum unilateral del 1 de octubre de 2017.

En septiembre de 2017, Puigneró fue interrogado en calidad de presidente del Centre de Telecomunicaciones y Tecnologíes de la Informació (CTTI), en el transcurso de una operación de la Guardia Civil ordenada por el juez relacionada con el referéndum del 1-O.