Ernest Maragall no renuncia a ser el alcalde de Barcelona, ​​aunque ahora mismo parece complicado que Ada Colau no consiga los apoyos necesarios para revalidar el cargo. En una comparecencia de prensa celebrada en la sede formación de ERC, Maragall anunció que presentará su candidatura a la alcaldía y que lo hará "pidiendo el voto a las fuerzas políticas con las que podemos compartir proyecto ciudad y un compromiso con los derechos y las libertades". De manera explícita subrayó que está" decidido a trabajar hasta el último momento para un acuerdo de gobierno con Barcelona en Común".

Cuando quedan menos de cuatro días para la constitución del Ayuntamiento, y con una Colau que ya ha anunciado la presentación de su candidatura a la alcaldía —que, en principio, contaría con los votos del PSC y de una parte de Barcelona pel Canvi-Ciutadans para alcanzar la mayoría absoluta de 21 escaños—, Maragall pidió reanudar las negociaciones formales con Barcelona en Común y le emplazó a reunirse, a poder ser mañana mismo, en una mesa en la que aceptaría la presencia del PSC. Eso sí, no se plantea en ningún caso un hipotético de gobierno tripartito que incluya los socialistas, tal como quisiera Colau.

Básicamente, la presencia del partido de Jaume Collboni serviría para "hacer la verificación abierta y transparente de porque estamos tan lejos del PSC y porque es imposible este acuerdo de gobierno", añadió el candidato de ERC.

El alcaldable de ERC también comentó que no han recibido ninguna respuesta de los Comunes respecto a los dos documentos programáticos que les han hecho llegar y a los que se añadirá la propuesta de organización municipal que ha anunciado este martes.

ERC plantea un consistorio dividido en seis áreas: Presidencia y Relaciones Internacionales; Cohesión social; Régimen interno, distritos y espacios públicos; Urbanismo y transición energética; Impulso y desarrollo económico; y Educación y Cultura. En ningún momento, dijo Maragall, se ha ofrecido un reparto de los años de alcaldía, más allá de lo que haya aparecido en la rumorología, pero sí hizo hincapié en que apuestan por que el gobierno entre ERC y Bcomú tuviera un "liderazgo compartido" entre él y Colau. Asimismo, aseguró que querrían profundizar en un acuerdo marco "para trabajar desde el primer día las desigualdades, la vivienda, la emergencia climática, la movilidad, la gobernanza metropolitana, etcétera".

El otro gran ámbito que prioriza ERC es lo que llama "derechos y libertades" y que resumidamente significa trabajar desde la ciudad por "la liberación de los presos políticos, el regreso de los exiliados y la celebración de un referéndum de autodeterminación". Por todo ello, Maragall considera que con Bcomú pueden compartir el programa "al 100%" y por eso pidió a Colau "sentarse de nuevo y concretar".

Todo apunta a que aún se vivirán algunas reuniones importantes de aquí al sábado para terminar el capítulo de la formación un nuevo Ayuntamiento en Barcelona, ​​con las elecciones del 26 de mayo como prolegómeno imprescindible. Ahora mismo, Colau parte como favorita para alcanzar la alcaldía, pero en la política catalana nunca se pueden descartar los giros de guión, por más inesperados que puedan parecer.