La campaña de este año de la Generalitat para la erradicación de las violencias machistas tiene un objetivo claro: interpelar a todas las personas para que rompan el silencio. No solo con aquellas violencias que representan la punta del iceberg, que son más visibles y tienen consecuencias muy graves, sino también con las que son diarias y más toleradas socialmente. "Siempre se había puesto el foco en la violencia física, pero nosotras hemos querido apelar al conjunto de la ciudadanía y señalar los comportamientos que a menudo se banalizan", afirma a Público la consellera de Igualdad y Feminismo del Govern, Eva Menor.

En el marco del 25N, Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, el Govern presentó el lunes la campaña "El silencio es violencia", con el fin de acabar con la complicidad de toda la sociedad, pero en especial de los hombres, frente a la violencia machista, implicándolos activamente en su denuncia y prevención.

La iniciativa presenta cuatro gráficas en las que tres hombres y una mujer son testigos de una agresión y se les interpela para que actúen, hablen o llamen al teléfono de atención 900 900 120. Los carteles se pueden ver en las estaciones de ferrocarril y de metro, además de en las redes sociales y medios de comunicación digitales y escritos.

La consellera argumenta a Público que "si no rompemos el silencio ante las violencias diarias, somos cómplices del sistema que vulnera los derechos de las mujeres". En este sentido, añade que "no hay un perfil estricto de maltratador" y que, por eso, es fundamental detectar las alertas para "trabajar en la prevención". Menor expone el caso del doble feminicidio en Rubí y Castellbisbal por parte de un excomandante de la Policía Nacional. "Nadie veía inicialmente ningún comportamiento que pudiera presentar un riesgo para las mujeres, que acabaron siendo víctimas mortales", lamenta.

32 medidas para erradicar las violencias machistas

El fenómeno de la violencia machista tiene diversas causas y, por tanto, necesita un enfoque multifactorial. Por ello, la consellera pone sobre la mesa un gran pacto catalán que evidencie el compromiso político de las instituciones y que represente un acuerdo colectivo y social, no solo para las entidades feministas que están organizadas. "Todos somos agentes de cambio", reitera. El Pacte Nacional contra la Violència Masclista se propuso en el Parlament de Catalunya hace algunos años, pero no se llegó a desarrollar.

Menor explica que el pacto incluirá varias mesas de trabajo, una a nivel parlamentario, donde se colaborará con todos los grupos; y también se impulsará la Comissió Nacional per a la Erradicació de les Violències Masclistes. Se trata de un "órgano que funciona desde hace mucho tiempo y que agrupa más de 90 entidades y personas expertas". "Esta comisión ya elaboró un plan de abordaje durante la anterior legislatura. Nosotros no empezamos de cero, revisaremos lo que se ha hecho y lo actualizaremos", añade.

Este pacto forma parte de las 32 medidas que aprobó el pasado martes el Govern para erradicar las violencias machistas. Son un conjunto de acciones transversales, que plantean un abordaje integral en todos los ámbitos, desde la empresa, pasando por la educación, hasta la sanidad.

Entre las medidas aprobadas, destaca la creación de la Comisaría de la Mujer y acciones en el ámbito judicial. Se diseñarán nuevos equipamientos judiciales, replanteando los existentes para garantizar espacios seguros que eviten la revictimización, con circuitos separados para víctimas y agresores. "Debemos coordinarnos mejor todos los departamentos, especialmente el de Interior y el de Justicia, para que todos entiendan cómo se debe atender a una persona que viene a denunciar", concreta.

En cuanto a la reparación, no solo se trabajará para desplegar todas las indemnizaciones e incrementar las cuantías de los pagos, sino también para mejorar el acompañamiento psicológico a las mujeres para que se recuperen de las situaciones de violencia. Otro objetivo es fomentar su inserción laboral.

El espacio digital, un nuevo campo de batalla

Igualdad y Feminismo prevé, por primera vez, la creación de un Servicio de Intervención Especializada (SIE) en violencias digitales. Este centro virtual, que comenzará a funcionar el próximo mes de febrero, proporcionará apoyo psicológico, legal y tecnológico a las mujeres que sufren acoso, coacciones o difamaciones a través de Internet. "Queremos un servicio que esté especializado en estas violencias, porque cada vez vemos más casos de ciberacoso, sobre todo en las mujeres más jóvenes", añade Menor.

Con todo, parece que el Govern ha dado un paso importante en la lucha por erradicar la violencia machista en Catalunya, aunque es fundamental que la sociedad civil siga ejerciendo presión para lograr políticas más efectivas. Mientras se implementan estas medidas, este lunes 25 de noviembre se celebrarán varias manifestaciones y concentraciones en todo el territorio para seguir denunciando esta lacra social.