El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el canciller alemán, Olaf Scholz, han certificado este martes el frente común para avanzar en el proyecto Midcat. Con este gasoducto, ambos mandatarios pretenden transportar el gas desde la Península hasta el corazón de Europa tras el temor de que Rusia corte su suministro en la próxima temporada invernal.

Así lo ha señalado Sánchez tras participar en una reunión del Consejo de Ministros del Gobierno alemán en la localidad de Meseberg, en las afueras de Berlín. "Agradezco mucho la visión compartida que tiene el canciller alemán sobre la necesidad de acelerar las interconexiones", ha afirmado.

El jefe de Ejecutivo español ha lamentado que no se cumplen con los objetivos de interconexión entre la Península y el resto de países europeos —que se encuentran por debajo del 3%—, marcados por la Comisión Europea. Por ello, recalca que España no explota al máximo su capacidad de regasificación ante la falta de conexiones con el centro del territorio europeo.

Francia ya ha rechazado la idea de aumentar las conexiones del gasoducto MidCat a través de los Pirineos. De esta forma, el mandatario ha esbozado la alternativa de trabajar en un gasoducto que conecte España e Italia. "Si (las interconexiones) no se desarrollan al ritmo adecuado, en la estrategia europea RepowerEU también se traza otra interconexión que es la de la Península e Italia", ha añadido.

Sánchez ha marcado su meta para mejorar las conexiones energéticas ya "sea por Francia o por Italia" para afirmar que su Ejecutivo "responderá a la llamada" de los países que más sufren el "chantaje inaceptable" en materia energética del presidente ruso, Vladimir Putin.

El proyecto MidCat lleva años paralizado por sus elevados costes y el ahora bajo precio del suministro del crudo ruso. Al gasoducto le quedan 226 kilómetros de tuberías por construir desde la localidad catalana de Hostalric hasta la francesa Barbaira. Una cuestión para la que España ha pedido ayuda a la Unión Europea para que sufrague los gastos.

Scholz apuesta por la energía verde

Durante este encuentro, el canciller alemán ha incidido en su apuesta por el potencial de las energías renovables del sur de Europa. "Es la gran tarea, la creación de una gran red europea eléctrica, de futuro para el hidrógeno y ahora para los gasoductos. Queremos hacer lo posible para lograrlo", ha señalado Scholz.

El dirigente alemán ha apuntado que mejorar las conexiones europeas es algo que contribuye a dar "estabilidad a sociedades y economías". Las palabras del mandatario se producen en un contexto marcado por los precios disparados de la luz en Alemania, a lo que se suma la reducción del 20% del suministro del gas ruso.

Este lunes, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, anunció "una intervención de emergencia" en el mercado de la electricidad para hacer frente al "chantaje" energético ruso. Durante esta jornada el ministro checo Jozef Sikela también anunció una próxima reunión el 9 de septiembre a la que acudirán los ministros de Energía de los diferentes países de la UE para debatir las medidas y "arreglar el mercado de la energía".

Entre las medidas urgentes a implementar se debate la idea de fijar un techo al precio del gas, una norma que ya se aplica en España e Italia a través de la denominada 'excepción ibérica' y que ha permitido al Ejecutivo español ahorrar 1.383 millones de euros, según sus cálculos.