La Policía serbia ha detenido al autor de un tiroteo que se saldó con ocho fallecidos y 14 heridos esta madrugada. El atacante, según los testigos, viajaba solo y armado en el interior de un vehículo, del que se bajó y abrió fuego. Según fuentes oficiales, la Policía está tratando de esclarecer los hechos y circunstancias de lo ocurrido.

Como apunta la agencia de noticias serbia Tanjugl, el ataque tuvo lugar en la localidad de Mladenovac, a 60 km de Belgrado. En concreto, el tiroteo ocurrió en la aldea de Dubona, que fue inmediatamente rodeada por la Policía. Después de registrar las casas de tres de los pueblos que rodean Mladenovac, el autor ha sido localizado y detenido cerca de la ciudad de Kragujevac, a unos 140 kilómetros de la capital.

El dispositivo de búsqueda ha contado con el despliegue de 600 agentes de las unidades especiales. El operativo seguía el rastro de U.B., de 21 años, ya detenido por las fuerzas policiales. De acuerdo con los medios de comunicación serbios, se trata del hijo de un militar. 

Según ha informado el Gobierno, el joven tenía un arsenal en su casa. Entre las armas encontradas durante el registro de la casa se cuentan una carabina con óptica, un fusil automático sin número de serie, una pistola, dos silenciadores, un cuchillo de caza, cuatro granadas de mano, y abundante munición de distintos tipos.

Entre los fallecidos se encuentra un policía que estaba fuera de servicio en el momento de los hechos y su hermana. En cuanto a los 13 heridos, la mayoría han sido trasladados a diversos hospitales de Smederevo y Belgrado, donde dos de ellos, de 21 y 23 años y en estado muy crítico, han sido intervenidos quirúrgicamente.

El crimen ha sido calificado como un "acto terrorista" por el ministro del Interior serbio, Bratislav Gasic. No es el único ataque armado que se ha producido en el país serbio en los últimos días.

Este nuevo tiroteo se produce tan solo unas horas después de que un estudiante de 13 años matara a tiros a ocho alumnos y a un vigilante de seguridad en una escuela de la capital belga, dejando tras de sí a otros siete heridos hospitalizados y a un país conmocionado. Lo ocurrido hace dos jornadas llevó al ministro de Educación, Branko Ruzic, a declarar tres días de luto nacional por ser la primera matanza en un colegio belga. Este viernes se cumpliría el tercer día del duelo.