Al menos diez palestinos han muerto este domingo, incluidos cuatro niños, en ataques israelíes en el centro y sur de la Franja de Gaza, donde el Hospital Kamal Adwan también fue atacado en el norte del enclave, que permanece bajo asedio militar desde hace 51 días y en el que ya han muerto o desaparecido unas 2.300 personas, según el departamento de Defensa Civil, dependiente de Hamas.

Dos niños han muerto hoy en el bombardeo israelí de una casa en el campamento de refugiados de Maghazi, en el centro de Gaza, donde un tercer gazatí ha fallecido en el ataque de un dron contra una tienda de campaña que albergaba a personas desplazadas en el campamento, ha informado la agencia de noticias palestina Wafa.

Según esa fuente, otras cuatro personas han muerto, incluidas dos hermanas de 12 y 11 años, en el bombardeo de una vivienda familiar de tres pisos en el campamento de refugiados de al Bureij, también el centro de la Franja.

En este ataque también ha resultado herida la madre de las niñas, mientras que el padre, Abdul Salam Abu Al Nahl, ha dicho a Wafa que la familia había sido forzosamente desplazada hace meses del campamento de refugiados de Al Shati, al oeste de la norteña ciudad de Gaza, a la casa de otros familiares en el campamento de refugiados de Al Bureij, donde han sido atacados mientras dormían.

Además, otros dos gazatíes han muerto hoy en el ataque contra una tienda de campaña para desplazados en la zona de Nuseirat (centro), según fuentes médicas, mientras que un tercero ha fallecido en el bombardeo contra un grupo de personas en Khirbet Al Adas, cerca de la escuela Al Aqqad, al norte de Rafah.

Anoche, varios médicos del Hospital Kamal Adwan en el asediado norte de la Franja resultaron heridos, entre ellos el doctor Hossam Abu Safia, director del hospital, cuyo estado de salud está siendo evaluado, según han informado empleados del centro que han denunciado ataques con drones y bombas explosivas contra "el patio y las instalaciones del hospital".

El Gobierno de Hamás ha condenado hoy los ataques y ha hecho un nuevo llamamiento a la comunidad internacional para que obligue a Israel a respetar el Derecho Internacional y proteja al personal médico palestino, tras la muerte de más de 1.000 médicos, enfermeras y trabajadores de la salud y la detención de más de 300, algunos sometidos a torturas y asesinados en interrogatorios.

"Hace dos días, varios miembros del personal del hospital, incluidos el Dr. Nihad Ghneim, el Dr. Saeed Joudeh y el Dr. Omar Al-Hawajri, resultaron heridos. El crimen más reciente implicó que la ocupación israelí lanzara una bomba contra el Dr. Hossam Abu Safia cuando salía de la sala de operaciones y se dirigía a su consultorio, causándole heridas directas en un crimen atroz que avergüenza a la humanidad: un intento de asesinato cobarde", ha denunciado hoy Hamás en un comunicado.

"Condenamos enérgicamente los ataques de la ocupación israelí contra el sistema de atención médica, los equipos médicos y la prevención de la entrada de medicamentos y suministros médicos. También condenamos el intento de asesinato del Dr. Hossam Abu Safia, director del Hospital Kamal Adwan", ha añadido.