Los ciudadanos de Kosovo, un país con 1,8 millones de habitantes, están convocados este domingo a unas elecciones parlamentarias anticipadas, las cuartas desde que la antigua provincia serbia proclamó su independencia en 2008, y en las que los sondeos dan una cierta ventaja a dos formaciones opositoras: una conservadora, de Vjosa Osmani, y otra nacionalista, de Albin Kurti.

Durante esta jornada, los kosovares elegirán en unos 2.550 colegios electorales desde las 07.00 hora local hasta las 15.00 hora local a los 120 diputados del Parlamento de entre 1.060 candidatos de 25 partidos y coaliciones.

Veinte escaños están garantizados para las minorías, la mitad de ellos para los serbios, cuya mayor formación es la Lista Serbia (SL), la única que tiene el apoyo de Belgrado.

Cuatro formaciones se han perfilado como las principales fuerzas con posibilidades de triunfar en estos elecciones.

Los sondeos indican que de ellas, dos opositoras llevan cierta ventaja sobre las otras dos: la conservadora Liga Democrática de Kosovo (LDK), con la jurista Vjosa Osmani como candidata a la jefatura del Gobierno, y la nacionalista Autodeterminación (Vetevendosje), de Albin Kurti.

Pero tampoco se descarta que puedan quedar en primer lugar el centroderechista Partido Democrático de Kosovo (PDK), principal partido del Gobierno saliente, o la coalición formada por la Alianza para el Futuro de Kosovo (AAK, nacionalista), del dimisionario primer ministro, Ramush Haradinaj, y el Partido Social-Demócrata de Kosovo (PSD), una escisión de Autodeterminación.

Según los analistas, sea cual sea el resultado de las urnas, ningún partido podrá gobernar en solitario, por lo que serán necesarias negociaciones para formar una coalición de dos o más integrantes.

La LDK y Autodeterminación se han mostrado inclinadas a aliarse tras los comicios, al tiempo que han descartado un pacto con el PDK, en el poder desde la independencia kosovar.

En el Parlamento podría entrar también la coalición de Nisma y la centrista Nueva Alianza de Kosovo (AKR), actual socio en el poder. La normalización de las relaciones con Serbia exigida por la Unión Europea (UE) será un gran reto para el nuevo Gobierno de Kosovo, pues el diálogo iniciado en 2011 está interrumpido desde noviembre pasado, cuando Pristina impuso aranceles del 100 % a los productos importados de Serbia.

Otro desafío será la mala situación de la economía, que en gran medida depende de las remesas de la diáspora y requiere inversiones extranjeras.

Estas elecciones se celebran dos años antes de lo previsto debido a la dimisión de Haradinaj, antiguo comandante guerrillero, tras haber sido convocado a declarar como sospechoso por el tribunal que juzga los crímenes de guerra en Kosovo entre 1998 y 2000.

Calma y pocas irregularidades

Las elecciones parlamentarias anticipadas en Kosovo transcurren este domingo con calma y una afluencia a las urnas del 9,64% en las primeras cuatro horas de la votación, ha informado la Comisión electoral central kosovar.

Según ha indicado la coalición de organizaciones no gubernamentales (ONG) "Democracia en acción" (DnV), que supervisa el proceso electoral, el número de irregularidades registrados hasta el momento es bajo, con algunos casos de ciudadanos que han intentado votar más de una vez o introducir varias papeletas en una urna.

Dos miembros de la comisión de control de un colegio electoral en el norte de Mitrovica fueron detenidas para ser interrogadas por haber aparentemente intentado facilitar la votación de unas personas con documentos no válidos, ha informado la emisora kosovar RTK2.