Israel ha continuado bombardeando amplias zonas del sur y el este del Líbano, donde al menos murieron seis personas, a primera hora de este domingo, después de que la víspera estos ataques aéreos a gran escala se saldaran con al menos 33 muertos, informó la Agencia Nacional de Noticias libanesa (ANN).

Según el medio estatal, la localidad oriental de Baalbek y otras aldeas cercanas "fueron objeto de una serie de violentos ataques que comenzaron a las 5.00 de la mañana (2.00 GMT) y que afectaron a fábricas, almacenes, tiendas, granjas y zonas pobladas", al tiempo que drones israelíes permanecieron en la zona durante varias horas.

Asimismo, la ANN afirmó que al menos seis personas murieron este domingo en un ataque aéreo que provocó el derrumbe de una casa en Al Ain, también en el este del Líbano, uno de los principales bastiones del grupo chií libanés Hizbulá.

Allí aún continúan las labores de rescate de cinco personas debajo de los escombros. En el sur, donde se han concentrado los bombardeos desde el inicio de las hostilidades hace casi un año, Israel efectuó ataques contra más de una decena de localidades que se saldaron con al menos tres muertos, según la ANN todos ellos combatientes afiliados al grupo chií Amal, aliado de Hizbulá.

El Ejército israelí, por su parte, informó esta mañana de que sus aviones de combate "atacaron en las últimas horas decenas de objetivos" del movimiento político y armado en varios puntos del Líbano en los que presuntamente se encontraban almacenes de armas y "estructuras militares".

Israel confirma la muerte de otro alto cargo de Hizbulá

Israel anunció este domingo la muerte de Nabil Qaouk, comandante de la unidad de Seguridad Preventiva de la organización chií Hizbulá, en un bombardeo el sábado contra los suburbios del Dahye, en el sur de Beirut.

Las fuerzas armadas aseguraron que se trató de un bombardeo "preciso", apenas un día después del ataque que acabó con la vida del líder de Hizbulá, Hasán Nasrala.

El grupo libanés, de momento, no se ha pronunciado sobre su muerte. Qaouk se unió a Hizbulá en 1980 y llegó a ejercer como diputado en el sur de Líbano de la mano de la organización, añadieron las fuerzas armadas, que lo describieron como una figura con presencia habitual en los medios de comunicación en representación del grupo chií.

La muerte del jefe de la seguridad interna de Hizbulá se enmarca en una intensa ofensiva israelí contra el grupo en Líbano, que deja ya más de un millar de muertos en distintos bastiones de la organización, ya sea en el sur del país, el Valle de la Bekaa o la capital, Beirut.

Según el Ministerio de Salud Pública libanés, al menos 33 personas murieron solo el sábado y otras 195 resultaron heridas en bombardeos de Israel, que desde el lunes realiza una intensa campaña de ataques aéreos contra el sur y el este del Líbano, pero también contra los suburbios sur de Beirut y otras zonas más al norte.

El ataque del viernes también se saldó con decenas de víctimas. El Ejército de Israel anunció este domingo que "eliminó" a más de una veintena de miembros de Hizbulá en el bombardeo masivo en Beirut del viernes, en el que también asesinaron a su máximo líder, Hasán Nasrala, y al comandante del frente sur Ali Karaki.

"También fueron eliminados más de otros 20 terroristas de diversos rangos, que estaban presentes en el cuartel general subterráneo (de Hizbulá) de Beirut", detalló un comunicado militar sobre el bombardeo que se sintió en toda la capital y cuyas cifras sobre muertes civiles aún se desconocen.

Más de un millar de personas han muerto en el Líbano desde que Israel intensificara sus ataques contra los bastiones del Hizbulá, unas acciones que han dejado también más de 6.000 heridos, según el Gobierno libanés.