Estados Unidos detuvo este jueves a Ismael "El Mayo" Zambada, líder y y cofundador del Cartel de Sinaloa, quien era buscado por las autoridades estadounidenses desde hace décadas. Junto a él viajaba Joaquín Guzmán López, hijo del narcotraficante mexicano, Chapo Guzmán, según el Departamento de Justicia. 

Después de ofrecer una recompensa de hasta 15 millones de dólares, fueron detenidos en un operativo en un pequeño aeródromo cercano a El Paso (Texas) y serán imputados por fabricación de drogas y manejo de redes de narcotráfico.

Se conocen pocos detalles de la operación que se ha llevado a cabo, la Agencia Antidroga de EEUU (DEA) aún no ha revelado detalles sobre un posible juicio. Sí se sabe que Zambada se declaró no culpable este viernes, ante el juez en El Paso, de los delitos de narcotráfico y lavado de dinero por lo que le imputa la Justicia estadounidense.

Por otro lado, el informe presentado por la DEA al Congreso reconoce que el estado de salud de Zambada no era favorable y su parte de la facción se tambaleaba. El otro cofundador de este cártel fue el Chapo Guzmán.

Una posible traición entre narcos

The New York Times publicaba este sábado que Ismael "El Mayo" Zambada viajó con el hijo del Chapo, Joaquín Guzmán, en una avioneta y con la intención de visitar unos terrenos para el lavado de dinero que, en principio, estaban en territorio mexicano. 

Zambada y Guzmán fueron detenidos por autoridades estadounidenses al descender del avión y se desconoce si los arrestados conocían su destino.

Según las fuentes policiales nombradas por el rotativo, Guzmán quería ayudar a su hermano Ovidio, quien fue extraditado en septiembre del año pasado en EEUU, por lo que cabe la posibilidad de que Guzmán creyese en una negociación entre su familia y las autoridades estadounidenses.

México ha asegurado que "no participó" en el operativo pero, según la secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez, no saben si se trató de una entrega o de una captura. "Ustedes preguntan si fue entrega o fue captura, esa es parte de la información que estamos esperando del Gobierno de Estados Unidos", sostuvo Rodríguez quien tampoco confirmó si hubo una negociación entre los líderes del Cártel de Sinaloa y Washington.

Por su parte, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, solicitó información a sus homólogos estadounidenses. "El Gobierno de Estados Unidos tiene que dar un informe completo, no es nada más así de declaraciones generales, hay que informar, tiene que haber transparencia", declaró el mandatario en su conferencia matutina.

Biden celebra la detención

Joe Biden, el aún presidente de Estados Unidos, celebró desde Washington el golpe a la cúpula del Cártel de Sinaloa, que describió como "una de las empresas más mortales del mundo".

"Demasiadas vidas de nuestros ciudadanos se han perdido ante el azote del fentanilo. Demasiadas familias se han roto y están sufriendo por esta droga destructiva. Mi administración continuará haciendo todo lo posible para que los narcotraficantes rindan cuentas y para salvar las vidas de los estadounidenses", indicó Biden. El presidente también felicitó a los implicados en el operativo por su "continuado trabajo para que el cártel de Sinaloa se enfrente a la Justicia".

Ovidio Guzmán permanece bajo custodia

A Ovidio Guzmán le siguen manteniendo bajo custodia, aunque la prensa mexicana especuló sobre su  posible puesta en libertad. Fue detenido y extraditado a Estados Unidos en el año 2023, después de que la Agencia Federal de Prisioneros (BOP) del país mostrase el jueves en su sistema, tras el arresto de Mayo, que Guzmán ya no estaba bajo su custodia.

"Puedo confirmar que Ovidio Guzmán López sigue en custodia en los Estados Unidos", declaró, no obstante, el embajador estadounidense Ken Salazar en un comunicado tras la polémica.

Rosa Icela Rodríguez añadió que la Embajada de EE.UU. les informó de que Ovidio Guzmán "no ha sido liberado", sino que fue "un cambio de medida cautelar".