Más de un centenar de personas murieron y decenas resultaron heridas por dos explosiones en el cementerio de la ciudad iraní de Kerman (centro), donde se conmemoraba el cuarto aniversario del asesinato del teniente general Qassem Soleimani. Las autoridades iraníes lo han calificado como un acto terrorista, informaron medios del país persa.

Las autoridades de la provincia de Kerman activaron medidas de emergencia en los hospitales para recibir a los heridos, según la agencia de noticias Tasnim, semioficial y vinculada a la Guardia Revolucionaria de Irán.

De acuerdo a la agencia oficial Irna, la Media Luna Roja en Kerman ha trasladado hasta el momento a unos 140 heridos a los hospitales desde el cementerio, donde miles de personas se concentraron este miércoles para conmemorar el aniversario de la muerte de Soleimani, considerado en Irán un mártir de la revolución y que murió en 2020 en un ataque estadounidense con drones en el aeropuerto de Bagdad.

El atentado de este miércoles supone un hecho de imprevisibles consecuencias en el mapa político y bélico de Oriente Medio. No en vano, la figura de Soleimani, quien jugó un importante papel en la lucha contra DAESH, gozaba de un amplio respeto en el país.

Lo ocurrido este miércoles reviste así una especia gravedad. Si su muerte supuso un grave ataque a la paz en la región, la masacre en los actos por el cuarto aniversario de su asesinato tendrá imprevisibles consecuencias.

Jamenei: "Este desastre tendrá una dura respuesta"

El líder supremo iraní, Alí Jamenei, ha advertido a "los enemigos" responsables del atentado de que tendrán "una dura respuesta", informa la agencia Mehr, próxima al liderazgo religioso chií. "Ellos, los enemigos, deben saber que este desastre tendrá una dura respuesta", dijo Jamenei.

"Los malvados y criminales enemigos de la nación iraní una vez más crearon un desastre y martirizaron a un gran número de personas queridas en Kerman", añadió el líder supremo iraní. "Los criminales de duro corazón no podían tolerar el amor y entusiasmo del pueblo para visitar el santuario de su gran comandante, el martir Suleimani".

El Gobierno anunció que mañana será un día de luto oficial. Jamenei expresó su "solidaridad con los heridos", mientras que países como Irak, Jordania, Siria, Venezuela o Rusia han condenado el atentado, al igual que la UE. Estados Unidos, que ofreció sus condolencias a las víctimas de esa "horrible explosión", asegura no tener razones para creer que Israel esté implicado en las explosiones.

Bombas por control remoto

La agencia oficial Irna informó de que la primera explosión se produjo a unos 700 metros de la tumba de Soleimani y la segunda a un kilómetro de distancia. Fuentes sin identificar citadas por Tasnim dijeron que las dos bombas fueron detonadas por control remoto.

Las fuentes citadas por estos medios precisaron que entre los muertos hay seis niños y que al menos una docena de los heridos están en situación crítica.

Iran amenaza con una "respuesta aplastante"

El ministro del Interior iraní, Ahmad Vahidi, dijo en declaraciones recogidas por la televisión pública que los culpables de este ataque recibirán "pronto" una "respuesta aplastante" e indicó que estos ataques con bomba son "la continuación de varios planes para matar civiles inocentes" en ceremonias públicas en todo el país, "muchos de los cuales fueron impedidos por los servicios de seguridad".

Del mismo modo se expresó el jefe del Poder Judicial y ex ministro de Inteligencia, Gholam Hossein Mohseni Ejei, quien prometió que los "perpetradores y aquellos responsables del ataque serán pronto aprehendidos y llevados ante la justicia".