Miles de personas han acudido en Madrid a la manifestación convocada por UGT y CCOO para exigir a la patronal una subida de los salarios, que garantice el poder adquisitivo de la clase trabajadora. Los sindicatos han exigido, bajo el lema "salario o conflicto", una mejora de las remuneraciones laborales teniendo en cuenta el contexto socioeconómico actual, marcado por la inflación y el bloqueo de las negociaciones entre los agentes sociales.

La concentración ha reunido a más de 50.000 personas, según los sindicatos, procedentes de varias comunidades autónomas y ha recorrido el centro de Madrid, confluyendo en la Plaza Mayor. Durante el recorrido, los manifestantes han ido portando banderas, pancartas y proclamas en contra de la patronal. Le exigen que retome el diálogo y que "se siente a negociar los convenios colectivos con mejoras salariales". Además, los sindicatos han advertido que no van a permitir que "esta crisis de precios la vuelvan a pagar los trabajadores". 

A la marcha han acudido Unai Sordo, secretario general de CCOO, y Pepe Álvarez, de UGT. Junto a sindicalistas de toda España "han montado una buena" para evitar que las empresas sigan apostando por "la congelación salarial, la desigualdad y la recesión en el país", según ha apuntado Sordo. Por su parte, Álvarez ha insistido en la necesidad de firmar convenios y ha recordado al Gobierno que el Salario Mínimo Interprofesional (SMI) debe alcanzar en 2023 los 1.100 euros.

Los asistentes, trabajadores de distintos sectores de la economía española, han aprovechado para reivindicar "los mismos sueldos y derechos" en todas las comunidades autónomas, así como "el cumplimiento de los convenios" y unas retribuciones dignas. También han pedido a los empresarios que "arrimen el hombro" y no dejen que la clase trabajadora afronte sola esta crisis. Desde la organización han calificado las protestas como "un punto de inflexión" y esperan que sirva como toque de atención para aquellos "poderes económicos que no dan la cara".